Cómo y cuándo se registró el récord de velocidad en coche en una carretera pública
¿Sabes cómo y cuándo se registró el récord de velocidad en coche en una carretera pública? Fue hace unos años y aún está vigente, ya que nadie lo ha podido batir. En este artículo te contamos cómo se fraguó este impresionante récord de velocidad máxima en un coche de producción.
Desde hace unos años, estamos asistiendo una interesante disputa entre dos fabricantes de hiperdeportivos por crear el coche de producción más veloz del mundo. Y esta batalla ha ido superando barreras hasta fijar el objetivo en la ansiada meta de los 500 km/h, un hito por ahora no alcanzado, pero que parece más cerca que nunca.
Las dos compañías detrás de esta carrera por alcanzar los 500 km/h son Bugatti y Koenigsegg. El primero en establecer un registro válido fue Bugatti, con el Veyron y sus 407 km/h. Esta cifra, en 2010, aumentaría hasta los 431 km/h con el Veyron Super Sport de 1.200 CV. Sin embargo, Koenigsegg logró arrebatarle este récord a su máximo oponente siete años más tarde, en 2017.
La forma elegida por Koenigsegg es única y demuestra, una vez más, que esta batalla es de David contra Goliat. Del pequeño contra el poderoso. Del que tiene recursos limitados contra el que dispone de todo el dinero y las instalaciones necesarias para desarrollar los mejores hiperdeportivos del planeta.
Y es que Bugatti, que pertenece al Grupo Volkswagen, tiene acceso a la pista de pruebas de Nardò, propiedad del gigante automotriz alemán. Este circuito circular mide 12,6 kilómetros y es el entorno perfecto donde poner a prueba la velocidad máxima de cualquier coche.
De hecho, fue aquí donde, en 2019, Bugatti respondió a Koenigsegg con el Chiron Super Sport 300+, que alcanzó la impresionante velocidad máxima de 490 km/h. Sin embargo, el registro no fue validado como récord mundial por el Libro Guinness de los Récords porque se realizó con un prototipo y no con la versión definitiva del vehículo de producción.
Cómo y cuándo se registró el récord de velocidad en coche en una carretera pública
El que sí fue validado fue el récord logrado por el Koenigsegg Agera RS a finales del año 2017. Este récord tiene la particularidad de que se logró con un coche de producción en serie que, en realidad, pertenecía a un cliente de Koenigsegg, y que se llevó a cabo en una carretera pública de Nevada, en Estados Unidos.
Al parecer, y según lo que contó más tarde el propio Christian von Koenigsegg, fundador de la compañía sueca, el propietario del Koenigsegg Agera RS en cuestión quería saber cuál era la velocidad máxima de su coche. Koenigsegg compartía este mismo deseo, pero no disponía del coche ni de las instalaciones necesarias para realizar semejante prueba.
Fue entonces cuando el cliente convenció a la compañía de que trataran de establecer la velocidad máxima del Koenigsegg Agera RS con su coche. Y, a través de los contactos necesarios, lograron disponer de una carretera pública cerrada al tráfico, una sección de 17,7 kilómetros entre Pahrump y Las Vegas, la Nevada State Road 160 que cruzaba el desierto de Nevada.
Esta espectacular recta de 11 millas fue cerrada al tráfico durante las jornadas del viernes 3 y sábado 4 de noviembre de 2017. La circulación de vehículos estaría restringida desde las 7:00 horas de la mañana y hasta las 3:00 horas de la tarde, tiempo más que de sobra para tratar de probar las capacidades del Agera RS.
Koenigsegg puso una sola condición: a los mandos del coche iría el piloto de prueba de la compañía, Niklas Lilja, por cuestiones de seguridad. Además, se utilizaría equipo de medición profesional para determinar la velocidad máxima exacta alcanzada por el Agera RS.
Como se puede comprobar en el vídeo que ilustra este artículo, el día que se estableció el récord de velocidad en coche en una carretera pública, se realizaron dos pasadas, una en cada sentido de la marcha.
Este es un requisito que establece el Libro Guinness de los Récords para validar un registro que se obtiene calculando la media de velocidad de los dos intentos. De este modo, el viento o un hipotético desnivel de la carretera, que por poco que parezcan puede favorecer o penalizar un intento de récord, no jugará a favor o en contra de los interesados.
En el primer intento, el Koenigsegg Agera RS alcanzó la friolera de 437,8 km/h con una distancia recorrida de unos 4.500 metros. Para lograrlo, Niklas Lilja exprimió los 1.160 CV de potencia que desarrolla el motor V8 biturbo de 5.0 litros que propulsa los 1.295 kilos de peso del hipercoche nórdico.
El segundo intento fue aún mejor. El Agera RS acaba alcanzando los 457,4 km/h tras haber cubierto una distancia de poco más de 6.000 metros. Al extraer la media de velocidad en los dos intentos, la cifra se situó en los 447 km/h, un récord mundial para un coche de producción que, seis años más tarde, aún no ha sido batido por ningún otro vehículo en las mismas condiciones.
Etiquetas: Hiperdeportivos
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