Las 3 medidas que maneja el Gobierno como sustituto del descuento de 20 céntimos en la gasolina

Cuando entró en vigor el descuento de 20 céntimos en los carburantes el pasado 1 de abril, todos sabíamos que era una medida temporal que en algún momento llegaría a su fin. Inicialmente se pensó que acabaría en junio, pero el Ejecutivo ha ido ampliando este plazo hasta fijarlo en el próximo 31 de diciembre.

A día de hoy, cuando resta algo menos de dos semanas para la fecha límite, aún no está del todo claro qué ocurrirá con este descuento universal en la gasolina y el diésel, ya que el Gobierno aún no ha aclarado si ampliará la bonificación a 2023, si centrará las ayudas en algunos colectivos de la sociedad o si lo eliminará sin reemplazo alguno.

¿Qué pasará con el descuento de 20 céntimos en gasolina en 2023?

Por el momento, estas son las 3 medidas que maneja el Gobierno como sustituto del descuento de 20 céntimos en la gasolina, unas medidas que aún no han sido confirmadas oficialmente, pero que podrían llegar a principios del próximo año.

Los precios han bajado, pero no a niveles de principios de año

Y es que la situación con los carburantes en España no se ha calmado. A día de hoy, el precio de la gasolina es de 1,586 euros/litro, mientras que el diésel está de media a 1,660 euros/litro. Llevamos semanas en bajada de precios, concretamente desde que en noviembre bajó el precio del barril de petróleo se han reducido sustancialmente los costes de los carburantes en las gasolineras.

Llenar el tanque de gasolina cuesta hoy en España menos que a principios de noviembre, aunque sigue por encima de lo que costaba hacerlo en enero de 2022. Lo mismo ocurre con el diésel, que sigue por encima del precio del litro de gasolina desde el pasado mes de agosto.

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Es complicado prever si la tendencia a la baja de los precios de los combustibles continuará en los próximos meses. La OPEP+ recortó la producción a 2 millones de barriles diarios, aunque el precio de las gasolineras no depende exclusivamente de ello. 

Tanto la capacidad de producción como de refino en Europa es un aspecto clave en la subida o bajada de los precios y, tras haber perdido el suministro procedente de Rusia y el conflicto con Ucrania, que no tiene previsto finalizar a corto plazo, lo cierto es que nadie sabe qué ocurrirá en 2023.

¿Qué sucederá con el descuento de 20 céntimos en la gasolina y el diésel?

Las opciones que manejaría el Gobierno para reemplazar el descuento de los 20 céntimos en la gasolina, el cual todo parece indicar que no irá más allá del próximo 31 de diciembre, serían tres, dos de los cuáles estarían enfocados en colectivos vulnerables y en las rentas más bajas, y un tercero que podría ser universal como lo ha sido hasta ahora la bonificación de 20 céntimos.

Una de las medidas estaría centrada en las familias con rentas bajas o media-baja. En este caso, el Gobierno podría adoptar el modelo francés, un bono de ayuda mensual para estas familias que, en el caso del país vecino, asciende a 100 euros. 

A esta ayuda que ofrecerá el Gobierno francés a partir del 31 de diciembre solo pueden acceder aquellos usuarios que empleen el coche para ir a trabajar (lo cual debe estar justificado mediante una declaración jurada) y que tengan unos ingresos inferiores a los 2.000 euros.

Otra de las medidas podría aplicarse a un colectivo concreto, el de los transportistas. La huelga iniciada el pasado mes de marzo a consecuencia de los disparados precios de los carburantes provocó que le Gobierno concediera la bonificación de los 20 céntimos, por lo que, con el fin de evitar un nuevo paro y el desabastecimiento, el Ejecutivo podría conceder nuevas ayudas al sector del transporte.

Por último, la tercera medida es la que llevan meses pidiendo desde la Confederación Española de Empresarios de Estaciones de Servicio (CEEES), que apuestan por una rebaja puntual en el impuesto a los carburantes como está ocurriendo con el gas o la electricidad que hoy cuentan con un IVA reducido al 5%.

La CEEES sigue insistiendo en la rebaja impositiva y cree que con los precios altos de los combustibles actuales, una rebaja puntual de los impuestos a los carburantes no tendría un efecto negativo para las arcas del Estado.