Consejos de ahorro para aplanar la curva (del gasto) en 2021

Lo bueno de echarle imaginación y replantearse los gastos que uno tiene en movilidad es que puedes ahorrarte un buen pico para empezar el año. Y quién sabe, a lo mejor pruebas fórmulas que te solucionen la vida ahora y más adelante. ¿Por qué no?   

Si tienes pensado estrenar coche, elige bien y, sobre todo, sé realista a la hora de determinar qué modelo necesitas, con qué combustible y qué descuentos hay. Y si ya tienes vehículo propio y quieres ahorrar a tope, aunque sea de forma temporal para capear el ídem, también aquí encontrarás trucos de lo que deberías hacer (y lo que no), con el fin de evitar gastos sin comprometer la mecánica a la largo plazo ni la seguridad. 

Y recuerda: la mayoría de los consejos son soluciones de emergencia, pero pueden aliviarte ya y hacer que empieces 2021 sin tantos apuros.  

1. Compra de coche nuevo

Vamos a empezar por el principio, ya que se trata de ahorrar en todo lo posible y de forma puntual, para salir del paso. ¿Te han dicho que en diciembre siempre hay descuentos porque los concesionarios tienen que cerrar el año y cuadrar números? Cierto. Pero ten en cuenta que además algunos modelos subirán de precio en 2021 para adaptarse a las nuevas normativas antipolución. Además, decide bien qué combustible necesitas. 

2. Financiación, descuentos...

Lo más barato sería no estrenar vehículo, claro, pero cuando es necesario hacerlo, también hay trucos de ahorro: mira bien las promociones y los descuentos de cada marca de coches y de cada concesionario (que no siempre coinciden). Contrasta sus condiciones de financiación con las que encuentres tú mismo por ahí (préstamos bancarios, etc.) y antes de achatarrar un coche, revisa las ayudas oficiales, por si lo entregaras. 

3. Seguros e impuestos

Antes de decidirte a comprar un coche nuevo (aunque esto también sirve para un usado), haz una simulación de lo que te vas a gastar en seguros, impuestos de matriculación (si lo tienes), de circulación, cada cuánto... A veces, un pequeño salto en año o cilindrada de un modelo supone un incremento enorme en los gastos totales. 

4. ITV

Igual que en el seguro, no debes circular sin ITV en vigor bajo ningún concepto. Pero sí puedes calcular cuándo te toca pasarla, para no hacerlo demasiado pronto, buscar la mejor oferta entre los centros autorizados... Verás que el ahorro puede ser tremendo incluso en una misma localidad.

5. Garaje

No es obligatorio que el coche duerma a cubierto y a lo mejor es el momento de replantearse si merece la pena o puedes prescindir de ello, aunque sea, temporalmente. Eso sí, si tu coche es goloso o tu zona muy fría, a lo mejor no conviene malgastar en heladas ni en gamberradas.

6. Arranque en frío

Aun descartando el riesgo de vandalismo, no olvides de que el desgaste mecánico de aparcar a la intemperie es enorme, tanto a largo plazo (pintura, gomas, neumáticos, tapicería, salpicadero...) como al arrancar en frío, especialmente en esta época del año.

7. Lunas

En caso de que tu vehículo no conozca garaje ni techado, trata de proteger las lunas (por lo menos, el parabrisas), para que cada mañana no tengas que gastar tiempo y combustible -que este práctico va de ahorro- en deshelar cualquiera de los cristales de tu automóvil. 

8. Consumibles

Antes de dar el contacto, cierra la puerta para que no haya iluminación de cortesía encendida. Apaga luces, radio, sistema de infoentretenimiento y cualquier cosa que reste fuerza a la batería y al motor de arranque. ¡Hasta la luneta térmica sube el gasto un 5%!

9. Repostajes

Si puedes esperar a cobrar para rellenar el tanque de combustible, perfecto, porque siempre te dará unos días de margen. Pero no te acostumbres a circular con poco carburante, porque se formarán más sedimentos y a la larga podrían generar costosas averías. Puedes ir con el depósito a mitad (también ahorrarás peso) y buscar siempre las gasolineras más baratas.

10. Recarga de baterías

Si ya tienes un coche eléctrico o híbrido-enchufable, puede ser un buen momento para ver dónde lo puedes cargar y a qué precio (incluso, gratis). Contar con un centro comercial de referencia con cargadores o la posibilidad de hacerlo en tu lugar de trabajo puede ayudar mucho a tus cuentas de primeros de año. 

11. Planificación

Todos deberíamos planificar la movilidad para circular de la forma más eficiente posible. Y ahora es más recomendable que nunca. Hoy la tecnología brinda una oportunidad excelente para calcular distancias, horarios, evitar atascos, obras, desvíos... y ahorrar pilas o combustible.  

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12. Marchas

Es un clásico en la ecoconducción para los automóviles con cambio manual. Jugar con las marchas y deslizarse por la ciudad y alrededores manteniendo 'bajitas' las revoluciones hará que pases menos veces por la gasolinera. Esto es otra de las soluciones a corto plazo, ya que con el tiempo, la mecánica podría llegar a resentirse. 

13. Anticipación

Por contra, el truco '12+1' vale las veces que quieras. Y cuanto más lo pongas en práctica, mejor. Se trata de sustituir las brusquedades por una conducción suave, en la que te anticipes a la situación (ejemplo: soltar el acelerador pronto cuando veas un semáforo en rojo), aproveches las inercias... y ahorres.  

14. Aparcamientos

Revisa los lugares en los que dejar el coche al llegar a tu destino... o casi. Porque los precios de los parkings 'disuasorios' pueden valer la pena a cambio de coger luego otro transporte (metro, autobús, patinete, bici) para la llamada 'última milla'. Tampoco olvides las ventajas de las etiquetas Eco y Cero.

15. Multas

Al margen de las cuestiones legales, morales y de seguridad vial que conlleva infringir las normas, ten en cuenta que, además, hasta una sanción administrativa leve podría echar por tierra todos tus cálculos de ahorro. No te la juegues, ni por los demás, ni por ti... ni por tu propio bolsillo. 

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16. Batería

Ahora toca una última parte dedicada al mantenimiento... o mejor dicho, a la falta de él. Si crees que el mejor ahorro para un coche es no utilizarlo, lamentamos decirte que ni siquiera eso basta, porque hay elementos que se estropean más aún por abandono. Ejemplo: la batería. Para mantenerla, arranca tu vehículo al menos una vez a la semana y da una vuelta.

17. Líquidos

Otro tanto sucede con los fluidos que hay bajo el capó: todo caduca con el tiempo, su vida útil se acortará mucho por desuso y no apetece sustituirlos antes de tiempo. Por no hablar de los manguitos, los retenes, los latiguillos, las bombas que los impulsan... Así que da una vuelta cada poco para preservar los sistemas de lubricación, refrigeración, admisión, frenos...

18. Neumáticos

Tampoco en esto debes ahorrar si toca cambiarlos (cuando el dibujo ronde los 2 mm de espesor, aunque la ley permita aguantarlos hasta los 1,6 mm). No prolongues su vida a partir del cuarto o quinto año de fabricación sin verificar que no están cristalizados o tienen algún desperfecto perceptible (deformaciones, pérdida de elasticidad, grietas, agujeros, desgaste desigual...). Cuando toque, busca buenas ofertas de marcas con garantías ¡y no montes gomas usadas!

19. No laves (tanto) el coche

Deja a un lado lo que sea puramente estético y, al margen de mantener unos mínimos de higiene en el habitáculo para un viaje saludable y que este consejo no perjudique a la seguridad (asegúrate de que las lunas, los faros y los pilotos cumplan su función), no te esmeres en dejar el coche reluciente. Y si lo haces, usa una pistola a presión en vez del túnel de lavado. 

20. Alternativas

Por último, para la cuesta de principios de año, puedes explorar todas las formas existentes de movilidad que hay ahora en el mundo-mundial: teletrabajo, transporte público, car-sharing, moto-sharing, bici-sharing, compartir tu coche o turnarte con el de otros... ¡Échale imaginación! 

Mi opinión

Nadie habla de renunciar para siempre al coche, ya que, incluso en ese caso, o lo haces bien o el remedio (por caro) puede ser peor que la enfermedad. ¡Pero todo tiene cura! Ojalá que estas 20 medicinas te sirvan para que la cuesta en este comienzo de 2021 duela menos.