Mitsubishi falseó las emisiones de ocho modelos más

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Mitsubishi lleva falseando las emisiones de sus coches desde 1991, como admitió la propia marca ya el pasado mes de abril. Entonces Mitsubishi Motors reconoció haber falseado datos sobre emisiones en más de 625.000 minivehículos vendidos en Japón; Ryugo Nakao -vicepresidente la marca- reconoció que llevan haciendo trampas desde 1991. Los representantes de la marca en España afirman que esta manipulación solo afecta a los vehículos comercializados en Japón, todos ellos microcoches. Sin embargo, tras la investigación preliminar del gobierno de ese país, se ha conocido que el fraude de las emisiones de Mitsubishi probablemente comprenderá otros ocho modelos, aunque no se han precisado cuáles, pero alguno de ellos -según parece todos microcoches que solo se venden en Japón- podría haber sido comercializado por Nissan también en ese país.

Según revela la agencia EFE, Mitsubishi se prepara para suspender la venta de todos los modelos afectados. Al parecer, la marca manipuló el proceso de prueba del consumo de combustible de estos vehículos de forma que los resultados de los test reflejaron unos datos de eficiencia energética mejores que los reales, tal y como ha explicado el presidente de la compañía, Tetsuro Aikawa, en una rueda de prensa convocada en Tokio.

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Por ahora, sin conocerse todavía el número de unidades afectadas en los ocho modelos en los que el ejecutivo japonés ha detectado anomalías en las emisones, la manipulación afeacta a unas 157.000 unidades de los modelos ek Wagon y ek Space producidos por Mitsubishi desde 2013, y a otras 468.000 unidades del Dayz y el Dayz Roox, ambos producidos de forma conjunta por esta compañía y comercializados por Nissan.

Mitsubishi halló los datos erróneos tras llevar a cabo una investigación interna y cuyos resultados han sido trasladados a las autoridades niponas, según ha anunciado el presidente en la rueda de prensa celebrada en la sede del Ministerio nipón de Transporte, Infraestructura y Turismo. "Seguiremos investigando qué ha pasado y quiénes son los responsables", señaló Aikawa, quien también explica que la compañía ha encargado la formación de una comisión de investigación independiente. El responsable de Mitsubishi añade que la compañía ha decidido detener la producción y comercialización de todos los citados modelos y pidió "sinceras disculpas" a los consumidores afectados, para los cuales la empresa estudia ofrecer compensaciones.

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Asimismo, afirma que "teniendo en cuenta la gravedad del caso", la empresa va a revisar los datos sobre consumo energético de otros modelos exportados al extranjero, y cuyos procesos de prueba varían según cada legislación nacional.

La pasada primavera el fabricante nipón se desplomó más de un 15 por ciento en la Bolsa de Tokio tras anunciar su convocatoria de prensa sobre irregularidades en sus controles de emisiones contaminantes, lo que supone su mayor caída desde julio de 2014.

Los modelos de minivehículos (aquellos con motores inferiores a los 660 centímetros cúbicos) son muy populares en el mercado japonés gracias a sus bajos costes de mantenimiento, su gasto de combustible más eficiente o su tamaño reducido.