¿El mejor corto de coches de la historia?
'Era una cita' (traducción de 'C'etait un rendez-vous') es, posiblemente, el mejor corto de coches de la historia. Es más que posible, también, que lo hayas visto en varias ocasiones, pues es, para mucho, un mito del celuloide y de la automación. Aún así, al verlo una vez más navegando por la Red, no me he podido resistir a mostrártelo.
Por si no lo conoces, te contaré que 'Era un cita' se rodó en 1976. Es un cortometraje muy especial porque los nueve minutos que dura la secuencia se rodaron sin trampa, ni cartón (sin un solo corte, retoque o manipulación).
El protagonista es el mismo director (Claude Lelouch, el de la foto) que conduce su propio coche (un Mercedes 450 SEL 6.9 al que colocó una cámara en la parte delantera) a toda velocidad por las calles de París. No le importan las normas, se salta los semáforos, circula en sentido contrario, rebasa los límites de velocidad… Todo para no llegar tarde a un encuentro con su mujer.
'Era un cita' dura nueve minutos. No podía ser más porque Lelouch no tenía más rollo de película (utilizó lo que le había sobrado del rodaje de la película 'Si c' etait à reafirme').
El rodaje del cortometraje se realizó a las cinco de la madrugada. Claude Lelouch pidió permiso, pero no se lo concedieron. Por eso, tras el primer pase el director fue arrestado. Cuentan que el jefe de policía le pidió el permiso de conducir, Lelouch se lo dió y, al instante, le fue devuelto. "He prometido a mis superiores que te quitaría el carné de conducir, pero no por cuanto tiempo", dijo.
En 'Era un cita' Lelouch se la jugó en muchos sentidos. Para él, mereció la pena. Ahora te toca juzgar y decidir si este es o no el mejor corto de coches de la historia…
Descubre más sobre Noelia López, autor/a de este artículo.
Conoce cómo trabajamos en Autobild España.