Conductores kamikazes, ¿por qué lo hacen? ¿cómo actuar si te cruzas con uno?

 La DGT los llama Conductores en Conducción Contraria (CCC). Un término para suavizar el hecho de que son homicidas con o sin intención  han provocado casi 150 accidentes y se han cobrado la vida de entre 25 y 30 personas en los últimos 10 años. El dato es de 2016 con lo que hay que sumar a la pareja que falleció tras chocar con un kamikaze en Cantabria.

Los conductores kamikazes son aquellos que circulan en sentido contrario a la marcha poniendo en riesgo su vida y la de otros automovilistas, por distintos motivos: vivir una aventura, un despiste, intención de suicidio, exceso de alcohol o drogas.

Kamikaze es un término de origen japonés que significa viento divino. Con el sentido que le damos hoy día, se empezó a utilizar durante la Segunda Guerra Mundial; kamikazes era el apodo con que los estadounidenses se referían a los pilotos de una unidad especial de la Armada Imperial Japonesa que realizaba ataques suicidas contra embarcaciones de los aliados. 

Los kamikazes japoneses pilotaban aviones cargados con bombas de 250 kgs e impactaban deliberadamente contra sus objetivos con el afán de hundirlos o averiarlos tan gravemente que no pudieran regresar a la batalla. 

¿Por qué circulan en sentido contrario?

Son varias las razones que hacen que un conductor circule en sentido contrario poniendo en peligro su vida y la del resto de usuarios de la vía. Las más habituales son:

• porque están borrachos

• por un error en la señalización o por una mala interpretación en la señalización
• por una apuesta
• por tendencias suicidas (son los menos)
• porque huye de la Policía

Las 10 clases de conductor kamikaze

Por los datos que facilita la DGT, se puede decir que la radiografía del conductor kamikaze es un varón de entre 25 y 30 años que conduce bajo los efectos del alcohol. Si acotamos este perfil a los que circulen en contra de la marcha por error en la interpretación de las señales, la edad del conductor se eleva de forma considerable.

El Instituto de Tráfico y Seguridad Vial (Intras) distingue varios tipos de conductores kamikaze en función de su motivación:

1. El "pagado". Cobra dinero; normalmente lo hace por una apuesta.

2. El "desequilibrado". Tiene un desajuste en su comportamiento, pudiendo hasta disfrutar de la reacción de miedo de los automovilistas con los que se cruza.

3. El "resentido". Presenta una conducta antisocial o resentida, cuyo único fin es causar mal.

4. El "aburrido". Se atribuye a los conductores con una situación económica favorable que buscan el placer del riesgo para salir de la monotonía en la que normalmente suelen vivir.

5. El "toxicómano". Es el conductor que termina circulando en sentido contrario debido a la influencia del alcohol o las drogas.

6. El conductor "erróneo". Aquel automovilistas despistado que se equivoca y entra en una autopista o autovía en contra dirección. Este caso se puede dar por una distracción de la propia persona o por la mala señalización de la carretera. 

7. El "imitador". Circula en sentido contrario porque sigue el ejemplo de lo que ve o escucha.

8. El "violento". Se convierte en kamikaze para adquirir o mantener notoriedad y protagonismo dentro de un grupo. Suele haber apuesta de por medio, pero no siempre obtiene beneficio económico.

9. El "fugitivo". Cuando el conductor que realiza maniobras suicidas para huir de la policía.

10. El conductor "suicida". Utiliza el coche de manera premeditada para quitarse la vida sin importarles o buscando que mueran personas con ellos.

Conducir en sentido contrario, ¿es falta o delito? 

Aunque la acción es la misma, la motivación que lleva a un conductor kamikaze a circular en sentido contrario marca el límite entre que lo que ha hecho sea infracción o delito.

Conductores a la cárcel. Estos son los 6 delitos de tráfico que se castigan con prisión

Tráfico tipifica como infracción muy grave el hecho de circular en contra de la dirección establecida en vías de doble sentido. La multa es de 500 euros y la pérdida de seis puntos del permiso de conducir.

El salto de infracción a delito, se da cuando se pone en peligro a terceras personas o cuando el conductor da positivo en alcohol o drogas. 

El Código Penal reconoce como delitos de tráfico la conducción temeraria, entendiendo por tal los casos en los que el consumo de alcohol es superior a 0,61 mg/l y aquellos en los que haya un desprecio manifiesto por la vida de los demás. Este último define a los conductores kamikaze voluntarios que se enfrentan a una pena mínima de prisión a dos años y una máxima a cinco años. Además, en estos casos se requisa el vehículo y el conductor se enfrenta a una multa de entre 12 y 24 meses y la retirada del permiso de conducir hasta 10 años.

"Con el nuevo Código Penal todo aquél que comete un homicidio imprudente como consecuencia de un delito del tráfico tiene pena de cárcel", explica Mario Arnaldo, presidente de la asociación Automovilistas Europeos Asociados (AEA).

El homicidio imprudente está castigado con penas de prisión de entre uno y cuatro años. Significa esto que el juez puede elegir en ese tramo la condena que impone al autor de los hechos. Ahora bien, en 2007, se decidió que cuando la muerte era consecuencia de un delito de tráfico (algo que sucede en el 14% de los fallecidos viales), el juez tendría que impone runa pena superior a la mitad superior de la pena, esto es, 2,6 meses.

¿Cómo actuar si te cruzas con un kamikaze?

CEA nos ha dado una serie de consejos para saber cómo actuar en caso de cruzarnos con un kamikaze en la carretera:

• poner las luces de posición y las antiniebla para que el conductor que viene de frente vea claramente tu posición
• no frenar de forma brusca, para evitar que los conductores que te siguen traten de adelantarte sin saber lo que se van a encontrar
• si ves que el kamikaze va directo a tu coche, échate lo más posible a la derecha, pero de forma suave
• avisa en cuanto puedas a la Policía o la Guardia Civil de Tráfico

¿Y si el kamikaze eres tú?

Todos podemos entrar en algún momento en el saco de conductores kamikaze por despiste.

Si el guardarraíl central o la mediana te quedan en el lado derecho; si solo ves la parte trasera de las señales; y si no ves ningún elemento reflectante en la carretera, todo pinta a que estas circulando en sentido contrario.

Tranquilo, CEA también nos ha dado las claves para actuar en esta situación. Lo que tienes que hacer es tratar de abandonar la vía lo antes posible y si no hay salida cercana pararte en el arcén, poner las luces de emergencia y pedir ayuda. Eso sí, hazlo con mucho cuidado y no atravieses todos los carriles de golpe, recuerda que eres tú quien va contra el tráfico y que en una autopista los coches pasan a gran velocidad.

Tres ejemplos reales

La DGT nos ha facilitado estos tres vídeos en los que aparecen ejemplos reales de conductores que recorrieron varios kilómetros en sentido contrario a la marcha. El primero se grabó en la A-2 y se ve cómo un coche de la Guardia Civil acompaña al kamikaze y le indica cómo abandonar la vía:

Este otro se grabó en la A-3, el conductor circula por el arcén, a baja velocidad:

El tercero corresponde a la A-7: