Prueba BMW F800 GS: pídele lo que quieras... y con carné A2

Quien tiene una BMW GS ("una GS", como se suele decir, sin más) suele recurrir a estas dos siglas -GS- para definir su moto, porque para quienes saben de esto, esta denominación supone casi una marca propia. Pero, ¿por qué hemos probado ahora la BMW F800 GS?

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BMW F800 GS (15 imágenes)

Porque es una moto moto manejable y polivalente a la que puedes pedirle (casi) lo que quieras. El tope de gama es la BMW R 1200 GS, con el nuevo motor bóxer refrigerado por aire y líquido, pero si quieres saltar de tu scooter 125 cc a una trail de verdad, limitable sin coste al carné A2, en BMW tienes otras máquinas muy recomendables para estrenarte en el asfalto y en los caminos: las GS de 650 cc, 700 cc y 800 cc.

Nosotros hemos probado esta 800 por ser un punto intermedio, y una de las mejores combinaciones del mercado entre prestaciones, confort, autonomía y versatilidad, que es lo que se busca en una trail de gama media -ahora tan de moda-. No es barata, (desde 11.200 euros), aunque sí muy recomendable. ¿Las causas?

Salvo que no te lleguen los pies al suelo incluso con la configuración rebajada -hasta 820 mm-, esta moto resulta bastante cómoda porque llevas una posición erguida y bastante elevada respecto al tráfico, además de contar con cierta protección contra el viento, si bien aquí la pantalla no es regulable y en esta unidad no teníamos protecciones en los puños. Aunque toda BMW GS te parezca un auténtico caballo, las dimensiones de esta te permitirán moverte con agilidad por todas partes, desde el tráfico urbano a las autovías -sus 85 CV rinden muy buen en cualquier marcha-, pasando por lo que distingue a una auténtica trail de las deportivas de carretera que se parecen a ellas: sus cualidades off-road.

¡En marcha!

Me encaramo con cuidado en lo alto de esta máquina sabiendo que, aunque en esta sesión de fotos el cielo está totalmente despejado, la previsión es de lluvias. Y por las características de esta motocicleta, te sientes un poco más tranquilo, pues, haciendo un símil automovilístico, la BMW F800 GS es más un todoterreno que un todocamino. Y si al equipamiento de serie (ABS, rueda de radios...) te parece poco, puedes pedir los paquetes Confort -515 euros- (ordenador de viaje, puños calefactables, soporte de maleta, caballete central) y Dinámico (control de tracción ASC, modo de conducción off-road y ajuste electrónico de la suspensión ESA).

Arranco y engrano marchas con suavidad. La elevada posición siempre es un aliciente para moverte entre el tráfico de la ciudad en hora punta, porque tienes más margen para la anticipación. Antes de salir, aprovecho para ir haciendo algunas compras en el centro y aprovechar la maleta con la que viene esta unidad de pruebas. En estas motos, las maletas resultan muy útiles. Esta rígida de BMW 'crece' unos cm y es fácil de poner y quitar ¡sin herramienta!

Ya por carretera, con el modo 'road' en el display del cuadro, cojo velocidad. Mucha. Sus líneas 'camperas' engañan, porque no restan aplomo ni comodidad. Sólo el asiento resulta poco ergonómico y resbala un poco con ciertos cubrepantalones cuando conduces con lluvia. Lo bueno es que si llevas un pasajero o mucha carga, puedes ajustar rápidamente la dureza de la suspensión trasera y el rebote de la misma.

Y hablando de todo un poco: empieza a cerrarse el cielo y las últimas horas de la tarde se convierten, lumínicamente hablando, en noche cerrada. Aminoro la velocidad hasta lo que marca el sentido común, pero la sensación de seguridad siempre es positiva: las ruedas mixtas de esta moto confieren buen agarre en firme deslizante dentro y fuera del asfalto. Y su estrechez -sobre todo en la delantera- también es un plus en este apartado. Fuera de vía pública, he superado los 200 km/h y el tren anterior no resultaba tan estable como en una moto puramente deportiva, pero a velocidades legales, cumple más que de sobra y no tienes la sensación de perder rueda ni con viento lateral.

Polivalencia a todas luces

Las condiciones meteorológicas se hacen cada vez más adversas y ahora sí que agradezco viajar en esta moto tan polivalente. Si te fijas en el frontal, el faro asimétrico sólo se mantiene ya en esta gama GS dentro de BMW, y sigue resultando eficaz cuando viajas totalmente a oscuras. Además, a los amantes de la sencillez y la fiabilidad les gustará que las ópticas iluminan bien y cuentan con bombillas halógenas que se cambian fácilmente y sin tener que desmontar nada dentro de dos cajetines como los de toda la vida, bajo el cuadro. Es indudable que los LED de la última BMW R1200 GS iluminan mejor, pero si quieres vivir aventuras lejanas, usar durante muchos años tu montura y tu presupuesto no es para tirar cohetes, pues, oye, estas cosas suman puntos.   

Hace una noche realmente desagradable, aunque la sensación al rodar entre charcos, barro y viento es reconfortante. En esta unidad, aunque no llevo protectores en las manos, los puños calefactables aportan una buena dosis de confort. Por el campo, aunque para un uso turístico no es indispensable, paso al modo Enduro, con el fin de asegurarme buen par motor en todo tipo de circunstancias. Poco a poco, voy haciendo una conducción cada vez más deportiva, igual que en la mañana en la que fueron hechas las fotos de la prueba de esta BMW F800 GS. Y el bloque de esta moto, que ya habíamos probado en la BMW F800 R, se comporta sobre este chasis, como es lógico, de un modo totalmente diferente, sobre todo, en pistas. 

En los caminos difíciles y vadeos es cuando verdaderamente aprecias las cualidades de esta máquina tan manejable. Has de acostumbrarte a ponerte de pie en el sillín, a meter la rueda delantera donde proceda, a dar gas por la arena mientras notas el suave derrapaje delante y detrás (aunque no hayas conducido en esas circunstancias, si has visto una carrera de 'dirt track', sabrás a lo que me refiero, salvando todas las distancias).

No hay límites tan cercanos como en otras motos y sí ganas de seguir haciendo kilómetros (y más aún cuando tienes 16 litros de depósito y en ruta he conseguido no subir de los 5,5 l a los 100 km).

Buen sabor de boca... y viene el 'restyling' 

Llega el mal tiempo y no es lo mismo conducir un scooter que una moto con la que puedas moverte con garantías por todo tipo de terrenos. Tras una semana de casi 1.000 km entre trayectos cotidianos y rutas en seco, mojado y con mucho barro, esta GS tan versátil te deja una amplia sonrisa... y ganas de exprimirla todavía más.

Todas las novedades del Salón de Milán (EICMA) 2015.

Si el precio no es lo primero, por 'dos kilos' tendrás una moto muy razonable, polivalente, con un consumo contenido... y con la que no te aburrirás nunca. Y ojo, porque en el último Salón de Milán, la marca ha dado a conocer la BMW F800 GS 2016, con lo que si te interesa esta GS, habrá que estar muy atento a las promociones en lo que resta de 2015 y principios de 2016 antes de que salga al mercado la nueva. ¿A qué esperas?

Lo mejor: versatilidad, prestaciones para su cilindrada, peso, consumo, ABS de serie.

Lo peor: líneas algo anticuadas, ergonomía del asiento, precio algo elevado con los extras que ves aquí.  

Equipamiento para esta prueba: Casco Axo Arrow, chaqueta Axo Madison, guantes Hevik Stoccolma.