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Prueba del Infiniti Q30 1.5D 7DCT: un compacto premium accesible

¿Compacto premium desde poco más de 23.000 euros? Veamos si merece la pena

En esta prueba del Infiniti Q30 1.5D 7DCT voy a tratar de descubrir si la versión de acceso a la gama es la más recomendable. Sí, es elegante y diferente, y un excelente producto para que la firma, finalmente, cale en España. Esta vez me toca poner a prueba el Infiniti Q30 1.5D 7DCT, la versión con el motor de acceso de 109 CV de origen Renault, acoplado al excelente cambio de doble embrague, que procede del Grupo Daimler. De Mercedes, de hecho, se aprovecha de multitud de elementos que los acopla en el interior. Un interior que a primera vista da una impresión de calidad, sensación que se confirma al examinar los materiales gomosos que se combinan con el cuero o algunos ornamentos de acero, que maridan a la perfección con la elegante palanca del cambio. Y la pega viene a la hora de adoptar elementos de la compañía alemana de la estrella, de la que escoge la botonería del climatizador, el cuadro de instrumentos, los botones de apertura de puertas, así como los del volante. Pero, oye, mejor si los recibe de una marca premium como Mercedes, ¿no?

 

Como te comentaba, mi unidad de pruebas equipa el motor 1.5D. Al ralentí se aprecia el sonido del motor, pero en marcha, siempre y cuando no se superen las 3.000 rpm, la rumorosidad no se filtra en el habitáculo. Destaca por su suavidad, por lo que invita a realizar una conducción tranquila, a disfrutar y devorar kilómetros en la carretera. Y más si tenemos en cuenta dos cosas: la primera es su cambio automático, que realiza las transiciones de forma rápida y casi imperceptible -no así desde parado, que se debe tener tacto con el pedal del acelerador para no sufrir salidas bruscas-. Y la segunda es su suspensión, que filtra las irregularidades del terreno con una facilidad pasmosa. Y ello lo hace sin balanceos en la carrocería, por lo que también responde adecuadamente en curva.

Dirijo la trayectoria del Infiniti Q30 de la prueba desde el volante, de tacto delicioso gracias al cuero que lo recubre, y lo hago de forma bastante precisa y con una dureza que me atrevería a decir que roza la perfección.

El Infiniti Q30 1.5D 7DCT es capaz de alcanzar los 190 km/h y de acelerar de 0 a 100 km/h en 11,9 segundos, aunque montado en él, la sensación de aceleración es mayor. También sobre el papel, pero solo sobre el papel, brinda un consumo medio de 4,3 l/100, cosa que durante la prueba se ha visto incrementado hasta los 5,4, una cifra realmente digna. En gran medida, ésta ha sido obtenida gracias al sistema start&stop, que funciona de forma rápida, y al modo de conducción ECO, que puede alternarse con el Sport, que varía la respuesta de la entrega de fuerza del motor.

En nuestro comparador de seguros hemos calculado lo que costaría asegurar un Infiniti Q30 1.5D 7DCT. Para calcular el precio, tomamos como referencia un hombre de 40 años, con 10 de antigüedad de carné y sin siniestros, que vive en Madrid, utiliza el coche a diario, aparca en un garaje colectivo y recorre hasta 20 000 kilómetros al año. Con estos datos, el seguro a todo riesgo más asequible lo ofrece AXA, por 405 euros.

Este coste podría ser menor si optas  por una póliza a todo riesgo con franquicia. En este caso, la más barata sería la de AXA. Cuesta 263 euros con franquicia de 260 euros.

Valoración

Nota7

Ponemos a prueba el Infiniti Q30 2016 con motor 1.5D y cambio de doble embrague 7DCT. Se trata de la versión de acceso a la gama y te sorprenderá por su calidad.

Lo mejor

Funcionamiento del cambio de doble embrague. La suspensión filtra muy bien los baches. Buena dirección.

Lo peor

Elementos muy reconocibles de origen Merceds-Benz. Motor demasiado suave. Motor ruidoso.

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