Hay veces que es mejor dejar tus habilidades para un circuito y no utilizar la calle para exhibir lo bien que sabes conducir o lo bueno que es tu coche. Lo decimos porque pueden pasarte cosas como esta: karma instantáneo.
VÍDEO: dos conductores tienen demasiada prisa y uno recibe una lección de karma instantánea
La policía siempre puede estar ahí, en un coche camuflado y eso es justamente lo que le pasa a nuestro protagonista. Desde Auto Bild estamos totalmente en contra de este tipo de conducción. ¿Por qué? Los conductores agresivos son un peligro real al volante. Cuando te cruces con uno de ellos lo mejor que puedes hacer es dejarles pasar y evitarlos.
Son imprevisibles y muy imprudentes. Y cuando arriesgas tanto como este conductor lo que te mereces es que la fuerza de la ley caiga sobre ti. ¿Consecuencias? Varias. La primera es que le va a caer una buena multa por conducción temeraria.
La conducción temeraria es el que pone en peligro la integridad y la vida de los otros usuarios de la vía. Está recogido en los artículos 380 y 381 del código penal y está considerada una infracción muy grave.
Debemos diferenciar la conducción temeraria de la conducción negligente, esta última dirigida a sancionar a aquellos que conducen sin el cuidado oportuno y sancionada con 200 euros de multa, sin pérdida de puntos.