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Tres años de cárcel para un guardia civil que 'hizo desaparecer' una multa por conducción temeraria

Este es traje actual de los agentes de Tráfico de la guardia Civil

Secuencia de los hechos: tramita una sanción, después rompe el boletín para modificar los datos, pero le pillan y ahora piden para este guardia civil tres años de cárcel por hacer desaparecer una multa por conducción temeraria.

El guardia civil que se enfrenta a una pena de tras años de prisión por manipular una multa está destinado en el puesto principal de Santa María de Guía, un municipio situado al norte de Gran Canaria. La sentencia dictada por la Audiencia Provincial de Las Palmas considera probado que el agente puso la denuncia y, meses después, rompió el parte del boletín para borrar la identidad del conductor; también que modificó la fecha, el lugar y la hora. ¿Para qué? Para que pareciera que se trataba de otra denuncia y evitar al conductor el pago de la multa y la pérdida de los puntos del permiso de conducir que acarreaba la sanción.

Según publica El Diario, además de la pena de prisión, la sentencia que le condena por un delito de falsedad en documento oficial, le impone una sanción de 3.600 euros y la inhabilitación durante años y medio para ejercer en las fuerzas y cuerpos de seguridad públicos. También deberá pagar las costas del juicio.

Los hechos sucedieron en 2014

Según relata la sentencia, los hechos se registraron en septiembre de 2014. Fue entonces cuando el agente denunció a un conductor que circulaba de forma temeraria con su vehículo por la carretera que une el casco de Guía con el barrio de La Atalaya. El agente tramitó la sanción correspondiente y se la notificó al conductor en el acto; este incluso firmó el boletín de denuncia.

Por razones que se desconocen, el agente no siguió con el procedimiento y no dio curso a la denuncia sino que la retuvo en su poder y cinco meses después la hizo desaparacer: rompió la parte que identificaba al conductor y cambió la fecha, hora y lugar por los de otra sanción que se había impuesto a un motorista.

Tal y como relata el medio digital, el agente redactó una declaración jurada en la que explicaba que no tenía el boletín original de la denuncia porque se le había volado como consecuencia del fuerte viento que había ese día. Eso habría provocado que el documento quedara ilegible (afirma que otros coches lo habían pisado) y que por eso había tenido que redactar un boletín nuevo.

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