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Bloodhound SSC: 365 km/h más rápido que el sonido

Bloodhound SSC: 365 km/h más rápido que el sonido
El Bloodhpound SSC tiene previsto convertirse en el coche más rápido sobre la faz de la tierra. Lo hará el 15 de octubre de 2016, cuando debería alcanzar los 1.600 km/h: hasta el sonido viaja más despacio...

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El Bloodhound SSC es un proyecto que empezó a andar en 2008, cuando unos cuantos decidieron batir el récord de velocidad de un coche sobre la tierra, algo, por cierto muy inglés, ya que desde que empezaron con estas 'historias', los ingleses han ostentado el galardón un total de 75 años. Parece que, tras un par de aplazamientos, el proyecto ya tiene fecha final: será el 15 de octubre de 2016 cuando esta especie de cohete con ruedas alcance (o intente alcanzar) los 1.600 km/h. Una velocidad interesante: no olvides que el sonido viaja a 1234,8 por hora, es decir, 365 km/h más despacio.

Cuando llegue esa fecha ya se habrán superado algunos hitos: este mismo 2015 se hará una especie de test en el que alcanzará 322 km/h... tan solo para comprobar que todo va bien. Más adelante, el supersónico SSC superará (o debería superar) 1.228 km/h que es el récord de velocidad que está vigente desde 1997.

Y ya, por fin, en 2016 el Bloodhound se convertirá en el objeto con ruedas más rápido sobre la faz de la tierra. Al 'volante' estará será Andy Green, que es un piloto de la RAF, el Ejército del aire británico... Y no se sentirá extraño ahí dentro.

Para empezar, porque ya ha pasado unas cuantas horas a bordo del SSC, pero también porque tendrá una especie de viejo amigo empujándole durante los primeros metros: un par de motores EJ100 de Rolls Royce que no, no son los del Phantom, sino los que propulsan al mismísmio Eurofighter.

Luego, cuando 'la cosa' lleve cierta velocidad, dos cohetes fabricados por NAMMO (especialistas en cohetes) seguirán empujando hasta la velocidad final de 1.600 km/h. En ese momento las ruedas girarán a 10.200 rpm... Por cierto, un motor V8 de Jaguar (con compresor alcanza 510 CV) servirá como bomba para mover los gases. En total, tendría un empuje parecido al de un Boeing 777, unas 102.500 libras de empuje, que es como se mide la potencia en estos motores (calcula más allá de los 120.000 CV), aunque con un peso ridículamente inferior.

Al parecer, el chasis del Boodhound SSC es el más fuerte que jamás se ha fabricado, con 12 capas de fibra de carbono, así como una estructura de aluminio entre medias. Además, solo el monocasco ha llevado más de 10.000 horas de diseño y fabricación. A pesar del tamaño, el monocasco pesa solo 200 kg.

Otro punto importante del Boodhound SSC es el parabrisas. Este no solo tiene que proteger a Andy Green de los posibles 'misiles' con los que se encontrará a 1.600 km/h; también tiene que servir para ralentizar el viento cuando se mueve a 480 km/h. Y es que si el aire se mete en el motor del vehículo a la velocidad del sonido, lo romperá, lo partirá por la mitad.

La cabina del Boodhound SSC es muy futurística y contiene una dirección impresa en 3D específica para las manos de Green. 

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