Tenemos dos víctimas nuevas del coche eléctrico

Ésta semana hemos tenido la mala noticia de dos nuevos coches que han sido víctima del coche eléctrico: Hyundai ha anunciado el cese de la producción de los Hyundai i30 N y Hyundai i20 N en Europa. 

¿El motivo? Según la propia marca, el movimiento está “en línea con nuestro compromiso de ofrecer una gama sin emisiones de escape a nuestros clientes para 2035 y operar de forma 100% neutra en carbono para 2045”.

A cambio, la marca coreana parece estar centrándose en desarrollar su división deportiva N por la vía de las cero emisiones, camino que ya ha comenzado a andar con el Ioniq 5 N.

“De cara al futuro en Europa, Hyundai está desarrollando el Hyundai N como pionero en vehículos eléctricos de alto rendimiento. Nuestros clientes se beneficiarán de los avances tecnológicos que harán que los vehículos eléctricos sean aún más atractivos en el futuro”, declaraba un portavoz de la compañía.

Tras sus palabras, se han empezado a realizar conjeturas de todo tipo sobre de qué manera se iba a ampliar la familia N, pero las dudas ya se han despejado: el objetivo es crear un coche eléctrico de alto rendimiento que se asequible.

Es algo que ha dejado claro Albert Biermann, Asesor Técnico Ejecutivo de Hyundai N, en el lanzamiento australiano del Ioniq 5 N, según recogen los compañeros de Carscoops.

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ioniq 5 n (8 imágenes)

“Estamos analizando intensamente qué tenemos en el bolsillo y cómo podemos convertir lo que tenemos en la condición adecuada. Este proceso se está llevando a cabo intensamente desde hace bastante tiempo porque, para mí, lo más importante es crear este automóvil [eléctrico] N más pequeño y asequible”, ha señalado.

“Necesitamos este automóvil N de segmento más pequeño y durante el resto de mi mandato en Hyundai Motor Group esta es mi prioridad absoluta número 1: idear un concepto para uno o dos automóviles, lo que sea, donde podamos ofrecer un verdadero coche N en un segmento más asequible pero con el mismo nivel de diversión o incluso mayor nivel de diversión al conducir”, ha concluido.

Has ahí las buenas noticias, porque todo lo demás está en el aire. La compañía ni siquiera tiene una hoja de ruta marcada para el modelo, así que no hay previsión siquiera de cuándo llegará a hacerse realidad.

Por otra parte, es algo lógico, porque aunque la intención es muy buena, conseguir un equilibrio entre un alto rendimiento y un precio contenido es algo complicado, sobre todo si hablamos de coches eléctricos, por el alto coste que todavía presentan.

Por otra parte, otra duda que surge es a qué segmento pertenecería este modelo, si al de los utilitarios o al de los compactos, para reemplazar a alguno de los dos modelos que desaparecen.

Sea tanto el primer caso como el segundo, Hyundai primero tendrá que crear un coche eléctrico “convencional” que haga de base para ello, puesto que hasta ahora no tiene ningún modelo de cero emisiones que sea más pequeño y/o asequible que el Ioniq 5, y Kia, por el momento, también se encuentra en la misma situación.