¿Por qué ser guardia civil de tráfico no es profesión de riesgo y sí lo es azafata de vuelo?

Los agentes que vigilan y velan por la seguridad de los conductores en las carreteras llevan mucho tiempo pidiendo mejoras en sus condiciones laborales. Han conseguido el apoyo de los jueces para que su salario se equipare al de las policías autonómicas pero hay algo que todavía tienen que luchar: que ser guardia civil de tráfico se considere profesión de riesgo.

En España, los toreros, azafatas de vuelo, mineros... se considera profesión de riesgo. También lo es ejercer de policía local, sin embargo, ni los policías nacionales ni los guardias civiles tienen esta consideración.

Ser guardia civil no es profesión de riesgo

Entrar a formar parte de las llamadas profesiones de riesgo es una de las reinvindicaciones históricas de la Guardia Civil. 

Legalmente se consideran profesiones de alto riesgo aquellas que "suponen un riesgo evidente para la salud de quienes los desempeñan". "Por norma general, este riesgo atañe a la salud física y en muchas ocasiones es la vida de los empleados la que se pone en juego", explican desde Mapfre. "Por ello, a nivel estatal se ponen en marcha una serie de medidas que regulan estas profesiones de riesgo para garantizar sobre todo la seguridad de los trabajadores", añaden.

Se consideran profesiones de riesgo, entre otros, los limpiadores en altura, los bomberos, los mineros, los artificieros, los submarinistas y los militares. Especialmente llamativo resulta que estos últimos sí, pero no los guardias civiles. ¿La razón? En realidad, según comentan los agentes, no hay ninguna clara, solo que nadie ha tenido a bien incluirles en este epígrafe.

No es por el 'título'

El problema es que no ser considerados profesionales de riesgo supone una merma de sus derechos laborales. Uno de los más evidentes llega con la jubilación. Es cierto que se jubilan antes que otros muchos gremios (normalmente cesan su actividad entre los 55 y los 58 años), pero su pensión es sensiblemente inferior. La merma, según algunas asociaciones oscila entre 600 y 900 euros al mes.

Es por esto que una de las principales asociaciones representantes de los agentes de Guardia Civil junto a otra de policías nacionales han remitido un escrito al Defensor del Pueblo el que solicitan el reconocimiento de las condiciones especiales de su trabajo para que puedan ser admitidos en la categoría de profesiones de riesgo.

"No podemos permitir que los guardias civiles se retiren con una pensión que no refleja los riesgos que han asumido durante su carrera profesional", afirman los portavoces de AUGC. "Necesitamos que se establezcan índices correctores adecuados para una jubilación digna y que la Administración tenga en cuenta los riesgos que asumen a diario los guardias civiles", añaden.