El propietario de este Aventador nos recuerda lo poderoso que son los toros salvajes
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Por fin, ¡ya era hora! La mayoría de los propietarios de superdeportivos de este planeta encierran sus fantásticas joyas en un garaje y poco disfrutan del poder que ofrecen. El propietario de este Aventador ha decidido que era el momento de disfrutar de cada euro, dolar, libra, o la moneda que haya utilizado para pagarlo. Y es que, para goce de los allí presentes y los que podemos ver este vídeo, exprimió el V12 que alimenta al toro salvaje de la marca italiana.
Son los coches más exigentes que se venden en el planeta. Cuentan con un nivel tecnológico heredado directamente de la competición. Todo en ellos ha sido estudiado al detalle para conseguir que el que se ponga al volante disfrute como un niño pequeño. Pero a veces, quien puede permitírselo, se olvida de ello. Toda una pena, ¿verdad? Tranquilos, porque hay quien no lo olvida.
En un aeródromo cerrado al público y en lo que imaginamos que era un evento de la marca, uno de los allí presente no dudo en montarse en su Lamborghini Aventador y abusar del acelerador sin piedad. La nube de humo que provocó el desgaste acelerado de sus gomas no tuvo desperdicio, quemando ruedas con una facilidad que solo entenderás si echas ojo a las características del superdeportivo de la marca. Para terminar, el mismo conductor vuelve a subirnos las pulsaciones con unos golpes de gas que suenan a gloria.
El Lamborghini Aventador monta el motor V12 de 6.5 litros de la firma. La potencia que consigue es de 700 caballos de potencia, una energía que se eleva hasta los 740 CV en el Aventador S y hasta los 750 CV en el Aventador SV.
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