Polestar Precept, ¿eco-LÓGICO?

Los hermanos pequeños son conscientes de que han crecido cuando ya no pueden usar la ropa vieja de sus hermanos mayores. Visto de esta manera, Polestar finalmente ha crecido. Después de que Polestar haya lanzado en serie el P1 (basado en el concept de coupé de Volvo) y teniendo en cuenta que el P2 es básicamente el estudio 40.1 de la marca sueca, el Precept es un modelo para el que no hay ningún modelo base, ningún estudio procedente de Volvo.

Apostamos por Precept como nombre

Y grande también es una buena palabra clave, pues Precept (apostamos por este nombre) se ha convertido en un gran producto. No por sus aproximadamente cinco metros de longitud, ni tampoco por la gran batalla de 3,10 metros, sino porque el jefe de Polestar, Thomas Ingenlath, y su equipo le han dado una repensada a todo. Se trata de la sostenibilidad, tanto en la conducción como en los materiales utilizados y la producción.

Pero vayamos por partes. Comencemos por el diseño. El Precept es asombrosamente radical –carece incluso de ventana trasera–, y está también bien lejos de la peculiar estética de un BMW i3. "Nos hemos centrado en líneas claras, mostrando la tecnología, en lugar de ocultarla",explica Maximilian Missoni, jefe de Diseño de Polestar. La "zona inteligente" reemplaza a la parrilla clásica. Los sensores para la conducción automatizada o incluso autónoma están ocultos detrás de la superficie. 

¡No lleva ventana trasera!

Sin embargo, decir que está oculto no es cierto, pues pequeñas "etiquetas" muestran desde el exterior qué sensores funcionan detrás de la superficie. El "Pod Lidar" se encuentra claramente visible en el techo y permite que los sensores alojados allí tengan una vista óptima. Y la ausencia de la ventana trasera (cámaras en lugar de espejos retrovisores interiores y exteriores) les ha dado a los diseñadores el margen suficiente para estirar el techo hacia atrás. Esto ayuda a la aerodinámica del vehículo y garantiza una increíble sensación de espacio sobre las cabezas de los pasajeros de la parte de atrás, indica Missoni.

En general, la marca eléctrica del grupo Volvo  está particularmente orgullosa del interior del Precept. Todos los materiales utilizados son veganos y reciclados, y aun así han conseguido un ambiente lujoso. Compuestos hechos de lino, texturas basadas en vetas de hojas, retroiluminadas con LED, para que este Polestar muestre cómo será el lujo del mañana. "Damos a nuestros clientes la oportunidad de descubrir gradualmente la profundidad del producto", explica el jefe de Diseño.

En cuanto al motor, Polestar aún no revela nada. Pero está configurado para que sea puramente eléctrico, con una autonomía probable de más de 500 kilómetros. La necesaria cuando el Precept se haga realidad en 2023. Y en este caso, los hermanos pequeños se convierten en un modelo a seguir para toda la familia. Si había que demostrar que algo falta algo en la monótona industria del automóvil, el Precept lo ha hecho. Diseño afilado y ecológicamente correcto. ¡Lo queremos!