BMW X3 o BMW iX3, sus cinco grandes diferencias

Recientemente BMW ha renovado el X3 y la versión eléctrica le ha seguido los pasos. Ahora que los coches enchufables están ganando protagonismo de verdad, es posible que estés dudando entre el BMW X3 y el BMW iX3, por eso te contamos sus cinco grandes diferencias.

Como siempre en estos casos, antes de seguir adelante, te recordamos que esta es una de nuestras comparativas técnicas y no es, por tanto una prueba en la que los hemos tenido en la redacción y los hemos conducido.

Aquí, básicamente, hablamos de los datos oficiales que publica BMW para establecer diferencias entre uno y otro y tengas claro cuál de los dos te interesa más. Vamos con las cinco grandes diferencias entre el BMW X3 y el BMW iX3.

Diferencias mecánicas

Aunque es obvio, al ser uno un modelo con motores de combustión y el otro un modelo 100% eléctrico, no por eso hay que dejar de comentar las opciones disponibles.

El BMW X3 está disponible cuatro motores de gasolina: xDrive20i de 184 CV, xDrive30i de 245 CV, M40i de 360 CV y M Competition de 510 CV y todos ellos, salvo el X3 M Competition, van asociados a sistema microhíbrido de 48 V, por lo que tienen la etiqueta ECO de la DGT. 

En diésel el X3 se ofrece también con cuatro versiones: sDrive 18d, xDrive 20d, xDrive 30 d y M40 d, cuyas potencias van de los 150 a los 340 CV. Y estas mecánicas ya contaban con hibridación ligera antes de este restyling.

Adicionalmente, está la versión híbrida enchufable xDrive30e, con 292 CV y hasta 50 km de autonomía eléctrica.

Todos los X3 tienen una caja de cambios automática de ocho marchas, de tipo convertidor de par y tracción a las cuatro ruedas, salvo el sDrive 18d.

La mecánica eléctrica del BMW iX3  está formada por un único motor (así que es un vehículo de propulsión trasera) de 286 CV de potencia, que va situado en el eje trasero y se nutre de la energía almacenada en una batería de 80 kWh de capacidad  (74 kWh utilizables), que le proporciona autonomía suficiente para recorrer 461 km.

Acelera de 0 a 100 km/h en 6,8 segundos y su velocidad máxima es de 180 km/h. El modelo de combustión más comparable por potencia sería el X3 xDrive 30d, que tiene también 286 CV y acelera de 0 a 10 km/h en 5,7 segundos y alcanza los 245 km/h.

Diferencias de consumo

No es precisamente sencillo establecer una comparativa de consumo entre un coche de combustión y uno eléctrico y menos con lo cambiantes que están los precios, tanto de los carburantes como de la luz. Pero te voy a poner un ejemplo para que te hagas una idea y tengas una referencia más o menos válida.

Como te decía, el modelo más comparable al iX3 por potencia es el X3 xDrive 30d, que gasta una media de 6,2 l/100 km. Como el precio del gasóleo está en torno a los 1,38 euros/litro, si tomamos como referencia un recorrido de 10.000 km al año (620 litros), el gasto anual para el X3 sería de unos 850 euros.

Ahora pasamos al iX3, que declara un gasto de 18,5 kWh/100 km. Para esos 10.000 km al año necesita recargar 1.850 kWh (1,85 megavatios) y con el precio de la luz en máximos históricos y rondando los 200 euros por MW, serían 370 euros, es decir, 480 euros al año de ahorro con el BMW iX3.

Sí, todo el mundo se asusta al ver el precio actual de la luz, pero pese a todo sigue siendo mucho más rentable el coste por uso de un eléctrico que el de un modelo de combustión. 

Si en la ecuación metiéramos el X3 híbrido enchufable la cosa tendría más miga, pero para eso debes hacer tus propios números en función del número de kilómetros que recorras en el día a día y comprobar si circularías casi siempre en eléctrico y solo con gasolina en los viajes para ver si te compensa.

Diferencias de diseño

En el X3 la parrilla delantera es ahora es más grande y está formada por una sola pieza, con los dos riñones típicos de BMW separados por una cámara frontal. Además, los faros son más delgados y el diseño lumínico de los pilotos ha cambiado. Sin olvidar que ambos paragolpes son distintos.

Por su parte, el iX3 ha renovado también su estética en consonancia con el modelo en el que se basa, que no es otro que el propio X3. Así, vemos que la parrilla se suma al mismo tipo de diseño, pero lo distinguirás porque en este va carenada, ya que no necesita refrigerar tanto. 

Los paragolpes también tienen un diseño específico en el eléctrico y, sobre todo, los distinguirás de lejos por los detalles de color azul que lo decoran. Y las llantas también son específicas del iX3.

Diferencias en el habitáculo

Por dentro son muy similares, la verdad. No hay diferencias de espacio y casi tampoco de diseño, salvo porque el volante puede ser diferente según qué modelo elijas. Ambos han actualizado el sistema multimedia con un procesador más rápido y funciones más intuitivas para, por ejemplo, introducir un destino en el navegador.

También se ha actualizado el sistema de reconocimiento de voz y cuenta con Apple CarPlay y Android Auto inalámbricos (antes no). El iX3, como es lógico, tiene un menú específico que indica datos propios del flujo de energía y de la entraga de potencia del sistema eléctrico.

Diferencia de precio entre el BMW X3 y el iX3

Y ya solo nos queda hablar de las diferencias económicas entre uno y otro. El BMW X3 está disponible desde 51.200 euros, que es lo que cuesta el sDrive 18 d. Y el abanico de precios llega hasta los 115.767 euros del X3 M Competition.

En cambio, el BMW iX3 se ofrece en dos versiones: Inspiring e Impressive, cuyos precios son 73.300 y 78.650 euros.

Una vez más, si lo comparamos con el xDrive 30 d, que cuesta 62.450 euros, vemos que la diferencia en su contra es de 10.850 euros. Pero con la diferencia en su coste por uso y lo que te ahorras en mantenimiento, impuestos municipales, al aparcar gratis en zonas de estacionamiento regulado y otros ventajas, lo puedes llegar a rentabilizar bastante rápido.