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Así funciona el Autopilot del Tesla Model S en una carretera en obras

Autopilot
El sistema Autopilot de Tesla muestra sus últimos avances al demostrar que puede funcionar correctamente en circunstancias adversas, algo especialmente importante en unas semanas complicadas para la conducción autónoma tras el accidente mortal causado por un coche de Uber.

No está siendo una buena época para el desarrollo de la conducción autónoma, después del accidente mortal causado por un coche de Uber dotado de este tipo de sistemas. De hecho, el abandono de la empresa de sus actividades en este sentido en suelo americano, algo por lo que también ha optado Toyota, solamente arrojan sombras sobre el futuro autónomo. No es el caso de Tesla, que ha demostrado que su Autopilot sigue perfeccionándose con el paso del tiempo. Y ojo, porque los de Elon Musk también han pasado dificultades de este tipo, como fue en 2016 cuando un hombre perdió la vida en uno de los coches americanos mientras operaba con el mencionado dispositivo.

Tal y como has podido ver en el vídeo que precede a este párrafo, el sistema de conducción autónoma de la marca americana ha sido capaz de circular sin problema alguno por una carretera en obras. Es decir, que el Tesla Model S que equipaba el Autopilot, en su última versión 8.1, fue capaz de reconocer todas las dificultades que se encontró a su paso, adaptándose a ellas sin riesgo alguno para los ocupantes. El coche fue capaz por sí mismo de bajar la velocidad e ir sorteando todos los obstáculos que encontraba a su paso.

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Esta nueva prueba del buen funcionamiento del Autopilot de Tesla no hace sino confirmar lo que todos sabemos ya a estas alturas, y es que la compañía especializada en coches eléctricos le saca varios cuerpos de ventaja a sus rivales en lo que a la tecnología autónoma se refiere. Eso sí, que los propios propietarios sean en ocasiones conejillos de indias con los avances del propio sistema sigue generando debate. Por suerte, los avances de Tesla en este campo son tales que rara vez se produce algún accidente.

Lo cierto es que lo que se ve en el vídeo es realmente impresionante. Sin duda, una muestra más de que la conducción autónoma será una realidad más pronto que tarde. Es cierto que por el camino de su desarrollo tendremos que vivir accidentes tan trágicos como los que hemos tenido hasta ahora, pero, ¿acaso no los ha habido cuando de desarrollar otras tecnologías se trata? El camino de la evolución nunca ha sido sencillo, pero desde luego que afrontarlo es la solución para poder disfrutar de las bondades de la nueva movilidad más pronto que tarde.

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