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Prueba Moto Guzzi Eldorado: italiana con espíritu americano

David Garcia de Navarrete

La Moto Guzzi Eldorado es italiana, pero claramente americana, la continuación de una noble y larga familia custom que estuvo muchos años defendiendo en solitario el estandarte del custom europeo. Antes de la prueba en sí, hablemos un poco de historia, porque Guzzi de eso tiene, y mucho.

La Moto Guzzi Eldorado 1400 es italiana, pero con orígen americano. En los ´70 y ´80 prácticamente no había más fábricas que hiciesen custom “de verdad” que Harley Davidson. No había más marcas americanas (no como ahora, con Indian o Victory, por ejemplo), los japoneses balbuceaban con sus primeras y extrañas custom de diseño oriental, y marcas ahora fuertes en el segmento como Triumph estaban desaparecidas o en “stand by”… pero curiosamente una fábrica italiana, mundialmente famosa por sus motos deportivas (por supuesto, como debía ser en aquella época, bicilíndricas), desarrolló una de las grandes custom más incombustibles y bonitas del historia reciente. Por supuesto, esa marca era la que hoy nos ocupa, Moto Guzzi, y la preciosa moto, la California.


Por una serie de carambolas históricas, a principios de los 70, a raíz de una oferta sorprendente de la V7 750 c.c. para el Departamento de Policía de Los Ángeles, es cuando nació la primera Moto Guzzi California y, sobre esa base, su lujoso modelo Ambassador.

Esa introducción en el mercado americano es claramente visible en el cine de la época, donde muchos de los policías, los rebeldes o los motoristas que salieran en la película, montaban sobre una moto italiana.


Lo cierto es que el motor fue subiendo de cilindrada hasta los 850, y con ello nació la primera de la noble familia que tenemos la suerte de probar en este test: la primera Eldorado. Reemplazó a la Ambassador con más cilindrada, más potencia y más lujo, todo como veras todo muy enfocado a  la mentalidad americana de la moto.

Bueno, los años siguientes Moto Guzzi sufrió distinta suerte, como gran parte de las empresas italianas del motor, y tuvo problemas de financiación, de industrialización, etcétera. Una de las últimas California fabricadas directamente por Guzzi tuve la “suerte” de probarla a principios de este siglo, y os aseguro que era una de las motos más complicadas y erráticas que he probado en mi vida. Preciosa, pero ni el cambio, ni los frenos en la parte ciclo estaban en el siglo XXI. En este momento, Guzzi estaba dando sus últimos estertores, y más tarde fue comprada por Aprilia, que más tarde su vez fue absorbida por Piaggio.

Aquí la cosa cambió totalmente, porque la marca disfrutó de un cambio absoluto, y se aprovechó gran parte de la tecnología y otras marcas del grupo (especialmente de Aprilia) para crear una nueva generación de Moto Guzzi acorde con lo que todos los fanáticos de la moto esperaban de ella.

Y así nació la California 1400 con un nuevo motor más grande, unas terminaciones excepcionales y un comportamiento envidiables. Y de ella, como era lógico, la marca de Mandello Di Lario comenzó a expander su gama custom y “muscle bike” con modelos tan preciosos como esta mega custom clásica y de tan precioso nombre: Eldorado.

[yb:https://youtu.be/e89j6uOOhhs]

Tecnología

Después de esta sección de historia (que casi parece sacada de un capítulo de Cuéntame), pasemos a lo que más te interesa: que ofrece esta preciosa moto.

Bueno, comencemos hablando de uno de los puntos más fuertes de cualquier custom, precisamente la estética. La Eldorado, lógicamente, sigue las líneas básicas de la California, pero combinando elementos totalmente clásicos y retro con alguna línea moderna y casi futurista, de esa forma maestra que sólo parecen saber hacer los italianos.

Prueba Moto Guzzi Eldorado: italiana con espíritu americano

Así, como ves en las fotos, es una moto claramente ancha y baja, con formas grandes y muy clásicas estilo “old school”, pero de repente elementos como la óptica delantera o el reloj central- sólo una esfera donde se concentra toda la información de la moto-le dan un toque diferente y muy atractivo, según pudimos comprobar durante la prueba. No hay momento en que te pares en que no se forme un corro de gente alrededor admirando sus formas. Y eso es especialmente admirable en un modelo de líneas tan conservadoras y una combinación de color tan clásico. Por cierto, el blanco y negro es realmente elegante y “vintage”, pero rogaríamos a los chicos de Moto Guzzi que dispusieran de una unidad de pruebas con la combinación blanca y roja, que es simplemente espectacular y mucho más brillante y agradecida para la sesión de fotos.

En cuanto al motor, el ya legendario y característico V2 a 90° transversal diseñado por Giulio Cesare Carcano hace ya casi 50 años, conoció ya la enésima versión de su desarrollo con la aparición de la California hace tres años. Tiene 1400 cc. y esta trufado de la última tecnología con una evolucionada inyección electrónica y tres curvas de potencia, control de tracción regulable, ABS, etc. Ahora proporciona 96 CV contundentes y rotundos, capaz de catapultarte hacia delante cada vez que roscas el acelerador. Para uso rutero, en la piña derecha tienes un pulsador grande para el control de velocidad.

Además, según las últimas tendencias, equipa una conectividad multimedia impensable hace ni siquiera pocos años. Conectando la aplicación con nuestro  móvil Smartphone- con una aplicación que te puedes bajar para Android o iPhone- consigues una auténtica y sofisticada computadora de viaje que conecta nuestro vehículo con Internet.
Así, podremos ver en la pantalla del teléfono una serie de información básica del vehículo, y tendremos todos los parámetros del viaje a la vista. En la pantalla táctil del smartphone se podrán ver hasta cinco parámetros a la vez, elegidos desde un menú grande, que incluye velocímetro, tacómetro, potencia instantánea, par motor instantáneo, consumo instantáneo y medio, velocidad media y voltaje de la batería, la aceleración longitudinal y ordenador de viaje. También tendremos la opción "Eco Ride", que limita el consumo proporcionando un resumen de los resultados obtenidos durante el viaje, que se pueden grabar y lanzar a las redes sociales que prefiramos.

Prueba Moto Guzzi Eldorado: italiana con espíritu americano

Rodando

Uno de los mayores problemas de la antigua generación de las California, todavía  de 1000 cm³, es que el chasis era igual para todos los modelos, y provenía de una de las motos históricas deportivas más importantes de la historia: la Le Mans. Por eso, la sensación era extraña porque montar toda la parafernalia custom en un chasis deportivo que obligaba cosas como tener las estriberas muy cerca, el asiento bajo, etcétera.

Con la 1400 todo esto cambió radicalmente, con un chasis específico. Sobre Eldorado te sorprende la manejabilidad y estabilidad que proporciona, siempre teniendo en cuenta que es una gran custom, todo conjuntado con un motor que empuja con buenos pistonazos-como debe ser en una moto así-pero con progresividad, fuerza y un excelente embrague hidarúlico. Los 96 CV puede no parecer mucho si nos referimos otro tipo de motos, pero básicamente, en las custom es difícil encontrar potencias mayores de 70 caballos, y muchas veces inferiores, lo que resulta escaso para poder empujar motos muy voluminosas. En este caso, los casi 100 te empujan cómo y dónde lo necesitas copn el empuje necesario, por lo que nunca te quedarás corto aunque lleves peso, en ningún adelantamiento ni básicamente en ninguna situación. De hecho, es una combinación peso-potencia casi perfecto para el uso tranquilo de una custom, e incluso con peso y con ritmos normales, se mantuvo tranquilamente por debajo de los 6 l.

Tanto la amortiguación como los frenos combinan solidez con capacidad de dosificación de una forma admirable. Que una custom de 314 kilos resulte manejable incluso a baja velocidad, y estable en curvas largas y rápidas, es admirable, pero la tradición deportiva pesa y es difícil que los italianos hagan una moto que no frene bien o que no sea estable. Eso sí, 314 kilos son muchos kilos y en parado tienes que empujarlos. Por cierto, aquí entra en juego el tradicional sistema de transmisión de Guzzi que es el cardán, que tiene un mantenimiento absolutamente nulo y en esta nueva generación tiene un comportamiento básicamente impecable, con pocas inercias y holguras mecánicas. Para el uso que se le presupone a una custom, incluso rodando “alegre”, perfecto.

Aquí no olvidemos las preciosas ruedas, equipadas con hombros de banda blanca  al estilo más retro posible, con unas lógicas y efectivas medidas de 130/90 delante y 180/65 detrás con 15 pulgadas de diámetro ambas, lejos de las estrambóticas medidas de otras custom que sólo valen para impresionar el catálogo y volver mucho más complicada la conducción . Además, las llantas tienen un precioso diseño multi radio.

Prueba Moto Guzzi Eldorado: italiana con espíritu americano

La puesta de la electrónica es poco menos que impecable, y aquí pesa mucho la experiencia de Aprilia en ese terreno. La navegación es relativamente fácil a través de un pulsador en la piña izquierda (aun que tienes que cogerle un poco el truco...), y puedes elegir el modo de potencia que prefieras- Rápido ,Turismo y Lluvia- con notables cambios en la entrega de  caballos para adaptarlo a cada uso. También el ABS tiene un intrusismo perfecto de forma que entra en funcionamiento sólo cuando lo necesitas, así como el control de tracción (MGTC) que además también es regulable. Salvo situaciones extremas, sólo te darás cuenta de su entrada en funcionamiento por un parpadeo en el gran reloj central de 150 mm de diámetro.

Eso sí, para cambiar la curva de potencia puedes hacerlo en marcha, pero tienes que tener el acelerador sin girar. En cambio, para meterte en el menú y poder variar ABS o tracción, has de estar parado. Una pena, porque en otras motos también se puede hacer rodando.

Conclusión

Incluso a quienes no sean unos fanáticos de las mega custom, la Guzzi Eldorado es de esas motos que encandilan y seducen a cualquier amante del mundo del motor en general y de las motos en especial. Todo está cuidado, todo está bien hecho y todo es bonito. La tecnología aplicada es admirable y lo hace en su justo punto, los ingenieros no han caído en la trampa de “emborrachar” de elementos electrónicos sólo útiles en súperdeportivas y que sólo lían al usuario con infinitas opciones. Dispone de los controles de electrónica realmente  válidos para un uso rutero, aunque personalmene preferiría faciliatar la navegación para su reglaje y que se pudiera modificar en marcha. No obstante, es una de las grandes custom más agradables, más completas y más efectivas de las que puedas disfrutar en el mercado actual.

Moto Guzzi está de nuevo fuerte en el universo custom. Disfrútalo, porque te aseguro que vale la pena por 18.868 euros.

Más y menos

Más: Diseño. Parte ciclo. Tecnología y electrónica.

Menos: Peso en parado. Protección aerodinámica. No se puede modificar el control de tracción o el ABS en marcha.

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La Moto Guzzi Eldorado es italiana, pero claramente americana, la continuación de una noble y larga familia custom que estuvo muchos años defendiendo en solitario el

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