Coche eléctrico o coche gasolina: pros y contras para comprarlos

Buscas coche nuevo, pero... hay algo que va seguir siendo una de las preguntas del millón en 2021: coche eléctrico o coche de gasolina... ¿Pros y contras para comprarlos, por favor? 

Los coches eléctricos más buscados

Lo entendemos muy requetebién, porque la electrificación es un hecho que no tiene vuelta atrás -al menos, a corto y medio plazo-, pero eso no quiere decir que los vehículos de combustión vayan a prohibirse mañana, por mucho que te cuenten por ahí. Así que es normal que ya te plantees el cambio pero no sepas si es prematuro de acuerdo con tu bolsillo y con tus verdaderas necesidades. 

VÍDEO: Porsche Taycan, récord Guinness al derrape más largo con un coche eléctrico:

Pues bien, antes de nada, cuando hablamos de coches eléctricos en este post, nos estamos refiriendo a los que son 100% enchufables y no a los híbridos puros (con un motor eléctrico y otro térmico) o de electrificación suave (motor térmico con sistema eléctrico de 48 V -MHEV-), a los híbridos enchufables (PHEV) o a los coches de autonomía extendida. 

Desventajas

Dicho esto, seguimos con los mayores problemas que tienen en este momento los coches eléctricos a los que nos referimos respecto a sus equivalentes de gasolina. 

• Precio de adquisición: comparativamente, siguen siendo más caros de adquirir, pero poco a poco van creciendo en cuota de mercado, interés por parte de todos... y eso está abaratando la tecnología considerablemente, con lo que están bajando los costes también que acaban repercutiendo en el cliente. Aunque las ayudas a la compra estatales se agoten y no hayan sido sólidas, conviene que mires bien ofertas y promociones de cada fabricante y concesionario. 
• Autonomía: cuando empezamos a probar coches eléctricos hace casi dos décadas, las baterías apenas duraban 60 km, en llano y por ciudad. Pero ya entonces nos parecía que este tipo de vehículos podían ser interesantes para un uso muy planificado y regular. Y en distancias cortas y sin desniveles, se les podía sacar mucho partido. El desarrollo de los fabricantes ha ido a una velocidad de vértigo y ahora la tecnología permite unos radios de hasta varios cientos de kilómetros. Pero sigue siendo el gran freno a este tipo de vehículos. Para empezar, por la escasez de puntos de recarga. 

• Puntos de recarga: pocos, en mal estado, sobresaturados, con diferentes enchufes que a veces no coinciden con el de tu modelo en cuestión... Y no te fíes de la gratuidad, pues algunos empiezan a ser ya de pago incluso en los lugares de trabajo que los ofrecen a sus empleados. Pueden salir a cuenta, pero hay que incluir este factor a la hora de valorar un coche eléctrico o un coche de gasolina, sus pros y sus contras. Y, de nuevo, este apartado es un claro ejemplo de cómo las marcas de coches van por delante de la Administración a la hora de crear infraestructuras que favorezcan las nuevas formas de movilidad. 
• Tiempo de recarga: al hilo de lo anterior, los tiempos de carga siguen siendo demasiado largos. Y si la proliferación de enchufes ha ido lenta, imagina el crecimiento de tomas de carga rápida o wallbox. Asimismo, hay que reconocer que algunos modelos tardan tanto en cargar que sólo acaban mereciendo la pena si te instalas en casa uno de estos postes.
• Planificación de la movilidad: en efecto, todo lo explicado aquí hace que un coche eléctrico te obliga a planificar la movilidad más que nunca, en detrimento de tu libertad de entrar y salir cuando quieras. 

Ventajas

No obstante, si tienes claros los kilómetros que vas a hacer al día y al año, cuánto vas a gastar por kilómetro y en caso de necesidad dispones de otras alternativas de transporte público o privado (otro coche, una moto...), entre un coche eléctrico y otro de gasolina, el primero puede salirte muy a cuenta. Porque, a grandes rasgos, ¿qué pros -dichos los contras- puede presentar el enchufable? 

• Consumo urbano: si echas números, verás que una recarga suele cundir muchísimo en ciudad, con una conducción normal -no, deportiva- y aprovechando las inercias y la regeneración en frenadas. Si vives en zonas proclives a estar mucho tiempo a baja velocidad e incluso detenido por semáforos y retenciones, el eléctrico brillará aún más en cuanto a consumos y confort (al no tener caja de cambios, embrague).

• Aceleración: además, incluso con una conducción sosegada y eco, podrás salir el primero con el disco en verde y no tendrás problemas de 'reprís', ya que sus mecánicas entrega todo el par desde abajo y de una vez, por lo que sus aceleraciones son especialmente brillantes.   
• Posibles ayudas a la compra: como te contábamos más arriba, los coches eléctricos suelen tener algún tipo de descuento directo en la adquisición, aunque ya no sea fruto de un plan estatal como el Movele. 
• Etiqueta Cero: ojo, porque en este año 2021 el sistema de etiquetas energéticas de la DGT cambia y la pegatina cero (azul, de 'cero emisiones') será más restrictiva y, por ejemplo, ya no la llevarán los coches híbridos enchufables. Sin embargo, los eléctricos puros sí se beneficiarán de ella. 

Vídeo: estas son las etiquetas de la DGT actualmente

• Ventajas de aparcamiento: en muchos municipios, los eléctricos puros pueden aparcar gratis en zonas de estacionamiento regulado tipo SER, ORA, etc.
• Ventajas de circulación por carriles especiales: otro tanto sucede a la hora de transitar por carriles especiales (ejemplo, de alta ocupación como los Bus-VAO) en los que se permite la entrada de los vehículos 'cero emisiones'. 
• Ventajas de tránsito en zonas/días restringidos por alta contaminación: del mismo modo, con un vehículo eléctrico serás el que menos problemas tenga si tu ayuntamiento restringe zonas debido a niveles altos de polución.
• Cero emisiones y ruido: dejamos para el final los dos últimos pros de un enchufable, que no por evidentes dejan de ser cualidades: un coche eléctrico, frente a un gasolina, no emite sustancias contaminantes a la atmósfera allí por donde va ni tampoco ruidos.  
• Mantenimiento: además, aunque los enchufables sean un portento de tecnología, sus mecánicas son más sencillas en términos generales, por lo que deberían tener menos piezas que se estropearan en relación con los coches convencionales. 

Así pues, a la hora de sopesar si tu próximo compañero de viaje debe ser un coche eléctrico o un coche gasolina, ten en cuenta estos pros y contras para comprar uno y otro, ten en cuenta el uso fundamental que vas a hacer de él, calcula bien los kilómetros que haces al año, cuándo amortizarías el desembolso inicial... y si te ves capaz de planificar lo suficiente tu movilidad sin recurrir a otro medio de transporte.