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Las 3 averías del coche según el color del humo de escape

Las 3 averías del coche según el color del humo de escape
Analiza tu coche por el color de los humos de escape. Con estos trucos, podrás saber en que estado se encuentra el motor de coche. Con un solo vistazo sabrás si el motor gasta aceite o tiene exceso de gasolina en su mezcla. ¿Te atreves a conocer estos prácticos consejos?

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Puedes analizar tu coche por el color de los humos de escape. El tono del humo que tu coche emite al exterior te puede ofrecer muchos más datos de lo que te puedes esperar. Conocer estos trucos puede ser muy práctico si tienes la intención de comprar un coche de segunda mano, simplemente, si pretendes tener tu coche con una puesta a punto perfecta.

Como ya te hemos comentado en otras ocasiones, la compra de un vehículo usado es un mundo de sorpresas. Los coches pueden tener 1.001 errores y muchos de ellos son muy difíciles de localizar. Además, muchos vendedores recurren a los prácticos 10 trucos para aumentar el valor de coche usado.

Lo primero que tienes que tener en cuenta para analizar el color de los humos de escape es que el coche tiene que tener el motor a temperatura de servicio. Es decir, no puede estar frío o recién puesto en marcha. En líneas generales, podemos distinguir tres coloraciones:

- Humo negro: indica una mezcla excesivamente rica, es decir, con mucho combustible.

- Humo azul: muestra que tu coche consume aceite. Sin duda, no son buenas noticias.

- Humo blanco: advierte de la existencia de vapor de agua en la combustión.

1. Humo negro en el escape

Como hemos comentado, el humo negro en el escape indica que el proceso de combustión de tu coche tiene una mezcla excesivamente rica. Es decir, una mayor relación de gasolina que de aire.

Este fallo vendrá acompañado por un consumo excesivo de gasolina y, cuando desmontes las bujías, verás que tienen los electrodos muy negros. Las causas de este defecto pueden ser:

a) Filtro de aire sucio: este elemento está tan sucio que impide que llegue la adecuada cantidad de aire al interior de los cilindros. Si tienes un coche clásico con carburador, tendrás muchísimo humo negro pero si es un coche actual con sistema de inyección, notarás que le cuesta muchísimo acelerar.

b) Presión de gasolina muy elevada: la bomba de gasolina está enviando combustible con muchísima fuerza. Debes llevarlo al taller para que comprueben la presión del circuito.

c) Mal reglaje del ralentí: las revoluciones correctas del ralentí es entre 750 a 900 rpm y también hay que regular las emisiones de CO2. Un ralentí muy rico provoca humos negros y un consumo excesivo.

d) Tubos de reaspiración del cárter: siempre pasan olvidados, pero los tubos de reaspiración del cárter son de gran importancia. A través de estos conductos, pasan los gases desde la culata al cárter. Lo ideal es revisarlos cada 60.000 kilómetros.

2. Humo azul en el escape

El humo azul en el escape muestra la existencia de aceite en el proceso de combustión de tu coche y, no hace falta que te diga, que no son buenas noticias. El humo azul indica que te enfrentas a una reparación muy costosa. Las causas pueden ser:

a) Mal estado de los segmentos del pistón: los segmento o aros del pistón no consiguen una estanqueidad total en los cilindros y el aceite pasa a la cámara de combustión. Es una reparación muy cara.

b) Retenes de las válvulas: los retenes de las válvulas no cierran por completo y, de nuevo, entra el aceite a la cámara de combustión. Comprarás que tienes mucho humo azul cuando acelerar después de estar el motor al ralentí.

c) Aceite inadecuado: tu motor está diseñado para trabajar con un aceite con una densidad específica. Si utilizas uno distinto, es posible que tanto los segmentos como los retenes no cumplan con su trabajo y tu motor emita un humo de color azul.

d) Turbo en mal estado: un turbo en mal estado puede hacer que entre aceite a la cámara de combustión. En este caso, deberás revisar el estado del turbo. No es necesario que compres uno nuevo, los turbocompresores se pueden reparar.

3. Humo blanco en el escape

Cuando analices tu coches por el color de los humos de escape, debes tener en cuenta que el humo blanco indica la presencia de agua en el proceso de combustión. Si tienes humo blanco en tu coche, prepara la cartera, las averías suelen ser muy costosas. Las causas son:

a) Rotura de la junta de culata: la junta de la culata es una lámina que una la culata con el bloque y que impide la entrada de agua al interior. Si tu coche tiene humo de color blanco, te habrás dado cuenta que gasta más agua de lo normal. No es conveniente que utilices un motor en este estado: solo para ir al taller.

b) Culata deformada: es posible que la propia junta de culata de haya alabeado o tenga una grieta. Por ello, entra agua en la cámara de combustión. Esta avería resulta más costosa de reparar que la de la rotura de la junta de culata. Calcula, más de 1.000 euros.

Como has podido comprobar, el color de los humos del sistema de escape dicen mucho sobre tu coche ya que son el resultado de un proceso de combustión en el interior de los cilindros. Debes estar atento a ellos si quieres que tu coche te dure muchos años y kilómetros.

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