Ante un accidente de tráfico 'In Itinere', ¿es obligatorio recibir el tratamiento médico de mi mutua laboral?

Según nos confirma Tráfico Ayuda, la respuesta es “NO”, ya que seguimos teniendo el derecho de elegir el centro médico y de rehabilitación que consideremos más adecuado para nosotros. Eso sí, nuestra Mutua Laboral supervisará nuestro estado y evolución y será quien se encargue de darnos la baja y el alta laboral. 

Tampoco sería muy aconsejable decantarnos por la clínica a la que nos derive la compañía del seguro del automóvil, pues ambas entidades, aunque existen honrosas excepciones, suelen dar bastante pronto el alta médica en aras de sus intereses económicos. 

Lo más aconsejable es asesorarnos bien sobre el tema y acudir a un centro médico adscrito al CONVENIO UNESPA.

Y SI LA MUTUA ME DA EL ALTA, ¿PUEDO SEGUIR LA REHABILITACIÓN EN EL CENTRO MÉDICO AL QUE ACUDO? 

Cuando se presenta esta situación, la Mutua, lo que nos está indicando, es que ya estamos en condiciones de comenzar a trabajar, pero este alta sólo tiene efecto laboral, y podemos seguir realizando nuestro tratamiento hasta que nos otorguen en el mismo el alta médica. 

Podremos cobrar esos días como “básicos” al recibir nuestra indemnización, que son aquellos en los que sin estar de baja laboral, tenemos “un perjuicio común que se padece hasta el final del proceso curativo o hasta la estabilización de la lesión y su conversión en secuela”.

La aseguradora está obligada a informar al accidentado de su derecho a la libre elección del centro médico en el cual se pueda realizar el tratamiento. 

No obstante, si sufres o has sufrido un accidente de tráfico y no sabes dónde acudir, lo más aconsejable es contratar los servicios de un profesional especializado que te asesore desde el primer momento para que no cometas errores. 

De esta forma, podrás recuperarte adecuadamente e incluso podrás llegar a cobrar la indemnización que te corresponda. 

¿Y QUÉ PASA SI YA HE EMPEZADO LA REHABILITACIÓN EN LA MUTUA Y NO ESTOY CONFORME CON EL TRATAMIENTO?

Por supuesto, puedes cambiar de centro y no podrían oponerse, ya que el convenio de asistencia sanitaria, en su artículo 2.1, nos dice que “en caso de que un accidente de tráfico sea a su vez uno laboral, prevalecerá lo estipulado para el primero”. 

No obstante, el traslado a veces puede resultar una ardua tarea. Habrá que tener en cuenta la política de admisiones de la clínica a la que queremos trasladarnos, pues, si no son muchas las sesiones que nos restan hasta el alta, no les interesaría económicamente, por lo cual, es muy importante que el centro al que vamos a acudir, nos garantice que vamos a recibir dicho tratamiento hasta el final y que sea la nueva clínica la que se ocupe de toda la burocracia pertinente para realizar dicho traslado. 

No es fácil elegir un centro “no afecto” a las aseguradoras, pues muchos cierran acuerdos con éstas, ofreciéndoles unos suculentos descuentos y comprometiéndose a dar de alta a los pacientes en el más corto período de tiempo posible. 

Por todo lo expuesto anteriormente, lo más aconsejable es ponerse en manos de un “abogado especialista en accidentes de tráfico”: se harán cargo de todo y sabrán aconsejarte el centro médico independiente de las aseguradoras más operativo para ti, que sea cercano a tu domicilio o a tu lugar de trabajo para que te sea lo más cómodo posible realizar el desplazamiento hasta el mismo. A su vez, te ofrecerán asesoramiento integral durante todo el proceso.

Fuente: Tráfico Ayuda