Por qué el Seat Altea fue uno de los modelos más exitosos de Seat

Hace ya unos cuantos años que no tenemos Al Seat Altea como coche nuevo. LA razón es bastante evidente: Seat sucumbió como una más a la moda de los SUV y decidió dar un giro en su estrategia. Eso supuso dejar de fabricar el prestigioso monovolumen, fecha que está ya grabada en la historia de Seat: noviembre de 2015. ¿Años en producción? 11 en total. ¿Unidades vendidas? Unas 500.000, lo que da buena cuenta del éxito que tuvo y que se nota en el mercado de segunda mano.

Lo curioso es que el Seat Altea jamás tuvo una segunda generación. Fue actualizándose a nivel de motores y equipamiento pero no recibió una segunda vida, que desde nuestro punta de vista estaba totalmente justificada. 

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Como bien sabes, la gama del Seat Altea era variada. En 2006 se sumó la variante Seat Altea XL, un modelo derivado de la segunda generación del Seat León y que representó la apuesta de la firma para el segmento de los monovolúmenes grandes. Y más tarde se atrevió con una variante camperizada con tracción integral que se denominó Seat Altea XL Freetrack.

Seat Altea: la clave del éxito

Pero, si te estás preguntando por que el Altea fue un modelo e éxito, ahí van algunas razones: primero, porque era un coche que se beneficiaba de muchas partes mecánicas del Volkswagen Golf. Pero a ello sumaba mucho más espacio interior y un maletero más capaz.

Aunque no era uno de esos SUV que finalmente decidirían su parada de producción, compartía muchas de sus virtudes: postura elevada, sensación desahogada, tracción integral en la versión XL Freetrack con refuerzos en los pasos de rueda y suspensión elevada... 

Los rivales del Seat Altea

Por eso, no es algo descabellado decir que era casi lo mismo que un Volkswagen en cuanto a sus 'tripas', pero a un precio más asequible. Hacía frente al Volkswagen Touran y a otros monovolúmenes de la época (ya tampoco se hacen, pero son muy interesantes como segunda mano) como los Ford C-Max o Kia Carens.

Lo bueno es que les superaba a todos ellos por sus dotes atléticas, ya que ofrecía un comportamiento bastante aplomado y su paso por curva era realmente alto. Todo gracias a estar asentado en la plataforma A5 (PQ35) del Grupo Volkswagen. ¡Y los asientos recogían perfectamente la espalda!

Vamos con sus medidas: 4,28 metros de longitud, 1,76 metros de ancho y su altura alcanza los 1,57 metros. El maletero del Seat Altea alcanzaba un volumen mínimo de 409 litros de capacidad.

Motores del Seat Altea

Toca hablar de la gama mecánica. Hay un pco de todo, empezando por varios motores TSI en el apartado de gasolina y otros tantos TDI en caso de las variantes de gasóleo. De los primeros, el acceso a la gama es el motor 1.2 TSI, con una potencia máxima de 105 CV y 175 Nm de par.

Le sigue el motor 1.4 TSI, disponible con 125 CV y 200 Nm de par máximo. El motor 1.8 TSI aumenta las especificaciones hasta obtener una potencia máxima de 160 CV y 250 Nm de par. Cierra el apartado de bloques gasolina un motor 2.0 TSI, con 211 CV y 280 Nm.

Las mecánicas diésel arrancan con el motor 1.6 TDI. Este motor de cuatro cilindros en línea e inyección directa proporciona una potencia máxima de 105 CV y 250 Nm de par. Un peldaño por encima encontramos el motor 2.0 TDI, que aumenta su potencia hasta los 140 CV y 320 Nm de par.Completa la gama de motores diésel del Seat Altea el mismo propulsor, un bloque 2.0 TDI con inyección directa, pero que eleva sus prestaciones gracias a los 170 CV de potencia máxima y 350 Nm de par.