Como ya hemos dicho en más de una ocasión, elegir un coche nuevo para comprar en 2023 no es nada fácil. No se debe a un tema de oferta, ya que hay multitud de modelos entre los que escoger; ni tiene que ver con los precios, aunque los coches sean considerablemente más caros que hace algo más de un año.

Las dudas surgen, principalmente, cuando llega el momento de seleccionar la motorización que más conviene. Algunos abogan directamente por el coche eléctrico, aunque lo cierto es que es una opción que no encaja para todo tipo de compradores y conductores. Por otro lado, los hay que siguen pensando en el coche de combustión interna tradicional como mejor elección.

Sin ninguna duda, ésta es la mayor ventaja de comprar un coche híbrido

Pero, ¿y si hubiera un tipo de vehículo que combina lo mejor de un coche eléctrico con las ventajas de un vehículo de combustión interna? Estos son, concretamente, los coches híbridos y en este artículo te vamos a mostrar todos los aspectos y características por los que debes considerar un coche híbrido como tu próxima opción de compra.

Menor consumo y mantenimiento más barato: por qué debes considerar un híbrido

Como bien sabrás, un coche híbrido es la opción a medio camino entre un vehículo con motor diésel o gasolina convencional y uno 100% eléctrico. Su sistema de propulsión combina un motor de combustión (generalmente de gasolina) y uno o varios propulsores eléctricos con una batería que cuenta con una capacidad energética menor a la de un coche eléctrico.

Hay varios grados de electrificación, desde un coche microhíbrido, pasando por un híbrido convencional y un híbrido enchufable. Los dos primeros tienen etiqueta ECO de la DGT, mientras que el modelo enchufable obtiene el distintivo ambiental 0 Emisiones si su autonomía en modo eléctrico es superior a los 40 kilómetros.

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Entre las principales ventajas de los coches híbridos está, obviamente, el menor consumo de combustible y la reducción de las emisiones contaminantes. 

A mayor nivel de electrificación, más bajo va a ser el consumo y las emisiones, llegando a reducirlos incluso a medias de 1 l/100 km, aunque es cierto que para lograr estos consumos es necesario que se cumplan algunos parámetros, como extraer el máximo potencial a la carga eléctrica de su batería.

Otra ventaja de los coches híbridos es que, debido a sus emisiones de CO2 más bajas se benefician de rebajas fiscales, como, por ejemplo, dependiendo del caso, llegar a estar exentos del pago del Impuesto de Matriculación y el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (el impuesto de circulación, como se le conoce comúnmente).

Mantenimiento y desgaste

Por otro lado, el mantenimiento en un coche híbrido es más económico que en el de uno de combustión interna tradicional. Por supuesto, conlleva cambios de aceite y filtros, pero se beneficia de un menor desgaste de partes como los frenos, mientras que el motor de combustión trabaja con menor intensidad al estar siempre apoyado por el motor o motores eléctricos.

Es cierto, por otro lado, que el peso de un coche híbrido es superior al de uno con motor de combustión (hay que sumar el peso de los componentes eléctricos adicionales), por lo que aumenta ligeramente el desgaste de los neumáticos. Sin embargo, el peso de este tipo de vehículos también suele ser más bajo que el de uno eléctrico puro.

Más fácil de usar en el día a día

Y luego está el hecho de que un coche híbrido es, por lo general, más fácil de usar en el día a día que uno eléctrico. Para empezar, equipar un motor de combustión que se alimenta de carburante y que lo único que tendrás que hacer será repostar en una gasolinera. 

Si el coche es un híbrido convencional, la recarga de la batería se realiza mediante la frenada regenerativa y utilizando el motor de combustión como generador eléctrico. Si es híbrido enchufable, además de a través de estos métodos, deberás enchufar el coche a una toma de carga si quieres beneficiarte de una autonomía eléctrica considerablemente mayor.

Además, frente a un vehículo eléctrico, los híbridos acaban con la temida ansiedad por la autonomía, ya que una vez agotada la carga de la batería, el coche funcionará usando el motor térmico, por lo que no padecerás el estrés por quedarte tirado por falta de carga en la batería.

Por último, un coche híbrido es más barato que uno eléctrico en la mayoría de casos, aunque también es más caro que uno de combustión tradicional. 

Si estás indeciso, por tanto, acerca de qué tipo de vehículo comprar en 2023, considera un coche híbrido como posible opción, ya que combina lo mejor de dos mundos (combustión y eléctrico) con etiqueta ECO o 0 Emisiones.