La Guardia Civil se camufla para pillar a los macarras del volante
Los cuerpos de seguridad tienen métodos muy diversos para atrapar a los delincuentes, pero en esta ocasión la Guardia Civil ha optado por usar el camuflaje para “dar caza” a una serie de infractores que se grabaron y subieron vídeos llevando a cabo conducción temeraria.
La investigación comenzó en el mes de junio, cuando llegó el aviso de diversos coches circulando de manera ilegal (altas velocidades, invasión del carril contrario, derrapes) en la zona de la Sierra de Cazorla y del Segura.
Ello puso en marcha al cuerpo, que empezó un seguimiento por redes sociales, reforzaron la presencia de agentes e incluso establecieron dispositivos de vigilancia en vehículos específicos camuflados.
Han tenido que pasar varios meses, pero finalmente la Guardia Civil ha conseguido identificar a cuatro personas con edades comprendidas entre los 19 y los 27 años como presuntos autores de un delito de conducción temeraria.
Serán juzgados y se enfrentarán a cargos de exceso de velocidad y conducción temeraria, ambas conductas pueden tipificarse como delito, con condenas que pueden incluir penas de prisión de 2 a 5 años, prohibición de derecho a conducir entre seis meses y 10 años, que se les requisen los vehículos empleados y que tengan que enfrentarse a multas.
Etiquetas: Guardia Civil
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