El Dakar 2022, en riesgo por presunto ataque terrorista

Caos en pleno Dakar 2022. El rally podría ser interrumpido por un presunto ataque terrorista, acontecido antes del inicio de la carrera, el pasado 30 de diciembre. Éste tuvo lugar a la salida del hotel Donatello, donde se produjo una misteriosa explosión en un coche del equipo Sodicars Racing, que afectó a seis personas.

El principal afectado fue el piloto Philippe Boutron, piloto del coche #260 de Sodicars Racing, y que resultó gravemente herido en sus piernas. Por ello, tuvo que ser operado de urgencia y trasladado a Francia. No fue hasta ayer, seis de enero, cuando Boutron salió del coma inducido en el que se encontraba. Hasta dentro de unos días no se sabrá cómo evolucionará, ha declarado su hijo.

Boutron es un empresario de 61 años que acumula ocho participaciones en el rally Dakar, entre ellas la última que se celebró en África. Es presidente del US Orléans de la segunda división francesa de fútbol.

¿Cancelación del Dakar por atentado terrorista?

El incidente ocurrido cerca del hotel Donatello está siendo investigado por la fiscalía antiterrorista francesa desde el cuatro de enero como un presunto ataque terrorista. Hoy, siete de enero, después de conocerse que Boutron había despertado del coma, el ministro de Asuntos Exteriores francés, Jean-Yves Le Drian, dijo en una entrevista que la carrera puede estar en peligro.

"Dijimos a los organizadores y a los funcionarios saudíes que teníamos que ser muy transparentes sobre lo que acababa de ocurrir, porque había hipótesis de que podía ser un acto terrorista", dijo Le Drian a BFM.

"Ya se han producido actos terroristas en Arabia Saudí contra intereses franceses. Era importante proteger a nuestros ciudadanos, advertir, prevenir y pedir la mayor transparencia, por lo que se recurrió a la fiscalía nacional antiterrorista. Hoy nos encontramos con esta situación: pudo ser un atentado terrorista contra el Dakar".

La organización del Dakar reforzó la seguridad en los campamentos donde descansan los distintos participantes y sus vehículos reciben asistencia. Estos campamentos (vivac, en el argot dakariano), van de etapa en etapa con más de 3.000 personas.

No es la primera vez que un ataque terrorista pone en duda la celebración del Dakar. De hecho, la edición de 2008 llegó a ser cancelada por las amenazas terroristas al paso del rally por Mauritania. El entonces ministro de Exteriores francés desaconsejó la celebración de la prueba como consecuencia de la tensa situación política.