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BMW R nineT Bavarian Fistfighter: retro-futuro

Diego de Arístegui

Retro-futuro, así es como podemos catalogar a esta BMW R nineT Bavarian Fistfighter, la última preparación que ha realizado el taiwanés Winston Yeh, uno de los más doctos en esta materia.

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Aquí tenéis la última creación de Winson Yeh, una BMW R nineT Bavarian Fistfighter. Este preparador taiwanés es uno de los mejores del planeta y el taller que tiene en Taiwán, Rough Crafts es uno de los punteros del sector y últimamente tienen bastantes encargos procedentes de BMW, ya que esta no es la primera vez que Yeh colabora con la firma bávara. 

Desde que la BMW R nineT salió al mercado, quedó claro que iba a ser una moto a la que muchos preparadores "iban a meter mano". Su mecánica invitaba a estos menesteres, así como su carácter atemporal, ya que refleja lo que fueron las primeras BMW que se vieron en las carreteras y a su vez no desentona nada en los tiempos que corren donde la modernidad ha venido para quedarse. 

Echando un vistazo en primer lugar a la parte del motor, observamos cómo se ha modificado el depósito, que ahora es de aluminio. Vemos que el propulsor se encuentra completamente desnudo, al que se han unido unas especies de trompetas que hacen que el motor respire correctamente cuando le llevamos a altas revoluciones. 

Los aires retros se respiran a través del asiento, diseñado en su totalidad por Rough Crafts. Si bajamos un poco la vista nos daremos cuenta que el tren trasero también experimenta notables modificaciones, especialmente en lo que se refiere al subchasis que parece haberse estirado haciendo la moto más grande. 

Es relativamente sencillo identificar los neumáticos que calza esta Bavarian Fistfighter, ya que el relieve de las gomas Pirelli son muy identificativas de la firma transalpina. Mucho más complicado es darse cuenta de donde provienen las llantas, y es que estas también han sido diseñadas por Winston Yeh y su equipo de mecánicos, dotándole del signo personal procedente de Rough Crafts. 

Por último, tampoco hay que pasar por alto otros detalles como los imponentes discos de freno delanteros de 330mm, obra de Beringer o la tapa de las culatas, que son obra del mismísimo Roland Sands. En definitiva, una demostración perfecta de cómo entender que la BMW R nineT es una moto pasada, presente y futura que siempre permanecerá en la eterna juventud. 

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