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Carlos Sainz prueba el camión de Albacete en el Jarama

Por un día se olvidó de la Fórmula 1... aunque no de los motores. En las siguientes líneas podrás ver cómo Carlos Sainz prueba el camión de Albacete en el Jarama. El español descubrió que un camión puede tener más espíritu "racing" del que esperaba.

Una vuelta al Jarama con Antonio Albacete

Jornada atípica para el piloto de Fórmula 1 Carlos Sainz. El madrileño visitó un circuito y se subió a un bólido de carreras... pero no a un monoplaza, ni siquiera a un turismo para dar unas vueltas al circuito más cercano al lugar donde ha crecido... sino a un camión de carreras. Carlos pudo ponerse al volante, nada más y nada menos, que del camión de Antonio Albacete, el tricampeón de Europa de carreras de camiones que este fin de semana afronta la penúltima cita del campeonato en el Jarama.

Nada más llegar al circuito, Carlos se enfundó el mono de carreras y se convirtió en alumno de Antonio Albacete, que le enseñó todo lo que debía saber antes de ponerse a los mandos de esta bestia de 5.400kg y 1.200CV de potencia. Antonio, que ha corrido en innumerables ocasiones en el trazado madrileño, dio a su alumno todos los consejos necesarios para aprovechar sus vueltas... y Carlos los aprovechó de la mejor forma. En su primera vuelta ya llegó a los 160 km/h a los que la velocidad del camión está limitada. Fue afrontando las rectas con cuidado y precisión, disfrutando de la conducción de este atípico bólido de carreras.

Carlos se bajó sonriente del camión y sus impresiones a los mandos del camión MAN del equipo con el que compite Cepsa en el Campeonato Europeo de Camiones no dejaron indiferentes a nadie:

“He flipado, porque me imaginaba que era un armatoste poco o nada racing, más camión que otra cosa, y menos vehículo de carreras. Pero mi idea estaba totalmente equivocada", señalaba Sainz. "Me ha gustado mucho y se nota que hay una gran preparación en el camión, no imaginaba que fuera tan de carreras. Me ha sorprendido y me ha gustado la experiencia", continúa, antes de entrar en detalles sobre sus sensaciones.

“Tiene mucha potencia y se siente con absoluta claridad, son 1200 CV, y cuando abres gas se siente mucho la llegada de los caballos y pierdes tracción con mucha facilidad. En mi primera vuelta ya he ido derrapando, me daba mucha confianza y es muy noble de respuesta. Ha sido una sorpresa muy agradable y una sorpresa total su funcionamiento, antes admiraba mucho a Antonio Albacete por lo que hace, y ahora lo admiro aún más", señala el de Toro Rosso, sin posibilidad de comparar el camión con un F1.

“No se puede comparar el camión con un Fórmula 1, sería muy injusto para el camión. Pero insisto en que es mucho más de carreras de lo que yo esperaba. El paso por curva, la aceleración, la velocidad y el par motor, el grip… Es muy de carreras”, concluye el madrileño.

Una vez acabó esta curiosa prueba, Carlos se marchó para seguir preparando la próxima cita del campeonato de Fórmula 1, que se disputará la próxima semana en el circuito de Sochi, en Rusia.

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