Logo Autobild.es

La increíble historia del Seat Marbella

La increíble historia del Seat Marbella

Estaba basado en el Panda, pero era más moderno y aerodinámico

1986 fue un año clave en España. El país consolidó la transición democrática con la entrada en vigor del Tratado de Adhesión a la entonces Comunidad Económica Europea, hoy Unión Europea. La ‘Quinta del Buitre’ hizo soñar a los españoles en el Mundial de México’86, hasta que la tanda de penaltis contra Bélgica acabó con cualquier esperanza. Dejad que las niñas se acerquen a mí, de Hombres G, se escuchaba en todas las radios. Y fue también el año de un coche histórico. Esta es la increíble historia del Seat Marbella.

Después del Seat 600, el Marbella es, quizá, el Seat que más nostalgia despierta en muchos conductores veteranos. De hecho, cumplió la misma función que el 600, pero en los años 80. Es decir, un vehículo práctico, barato, fiable y fácil de mantener. Para muchos ha sido el primer coche tras obtener el permiso de conducir. Se mantuvo en producción durante 12 años, desde 1986 hasta 1998.

Final de la etapa Fiat

La increíble historia del Seat Marbella

En 1986, Seat ya no formaba parte de Fiat, un matrimonio que había iniciado en los años 50 y concluido a principios de los 80. En esa década se produjo la transición desde la marca italiana al Grupo Volkswagen. Pero, entre tanto, la marca española produjo algunos modelos propios, como el Ronda y el Marbella. El lanzamiento del Marbella coincidió con la adquisición de Seat por parte de los de Wolfsburgo. 

El Seat Marbella estaba basado en el Panda, al que se le habían añadido algunas modificaciones en el diseño para diferenciarlo de aquel. El Panda había sido un coche de un éxito rotundo, no solo dentro de las fronteras españolas, sino, por supuesto, en Italia y en otros países europeos. Nacido del lápiz de Giorgetto Giuggiaro, era un coche muy práctico, sencillo y espacioso para su tamaño, además de fiable. 

Motores del 850 y del 127

La increíble historia del Seat Marbella

El Seat Panda utilizaba las motorizaciones de los Seat 850 y 127, con 35 y 45 CV, respectivamente. Poco después, hubo una versión intermedia, con 40 CV. Gracias a sus 700 kg de peso, la potencia movía con solvencia al vehículo. Las formas de la carrocería permitían una habitabilidad generosa, teniendo en cuenta sus dimensiones. El interior era tremendamente espartano, pero muy práctico. 

En Italia fue famosa la versión 4x4 del Panda, pero en España nunca llegó a comercializarse. No obstante, hubo variantes con ciertas capacidades fuera del asfalto, como el Seat Panda Montaña y los vehículos comerciales Seat Panda Trans y Seat Panda Emelba.

Seat Marbella: pasión gitana y sangre española

El Marbella fue un modelo puramente español. Tras los problemas que había tenido con Fiat con el Seat Ronda (la marca italiana acusó de plagio a la española, aunque el caso se resolvió a favor de Seat), la marca española introdujo variaciones en el diseño y en las mecánicas. Tenía un diseño más juvenil y fresco, con una inclinación del frontal para mejorar la aerodinámica y dentro tenía mejores asientos y un volante de dos radios.

Se comercializó con tres versiones iniciales: L, GL y GLX. La primera era la más básica y tenía un cambio de cuatro marchas. Las dos siguientes eran más refinadas e incluían un equipamiento más completo. el Marbella era un coche ideal para la ciudad, gracias a su consumo bajo y buena maniobrabilidad. Además, era un vehículo óptimo para el campo, ya que tenía una buena altura libre y un eje trasero rígido con ballestas que permitía llevarlo cargado por caminos en mal estado. 

El Seat Marbella en competición

La increíble historia del Seat Marbella

El Seat Marbella tubo alguna que otra incursión en el mundo de las carreras, siempre a pequeña escala. Sin embargo, ha cobrado especial protagonismo en los últimos años, gracias al “Panda Raid”, gracias a que es un coche muy manejable y es económico de adquirir y de preparar

Esto explica que hayan subido los precios en el mercado de segunda mano. El Marbella sorprende por su paso por curva, su ligereza hace que tenga pocas inercias y su escasa potencia hace que los pilotos tengan que esforzarse para no perder velocidad. 

Versiones especiales del Seat Marbella

La increíble historia del Seat Marbella

Hubo versiones especiales del Marbella, como el prototipo presentado en el Salón de Frankfurt en 1991, el Seat Marbella Playa Concept, aunque nunca llegó a producción. Tenía una carrocería de tipo pick-up un diseño más moderno de los paragolpes, los faros con ópticas amarillas y una parrilla más estrecha. Lucía un color amarillo claro con la inscripción PLAYA en el lateral, llantas en el mismo color y barras antivuelco. 

Seat también produjo otra versión pick-up basada en el Playa Concept, en este caso, más básica que la presentada en Frankfurt, con una reja que separaba el interior del cajón trasero. Más de un millón de unidades se vendieron del Seat Marbella, hasta que cesó su producción en 1998, siendo sustituido por el Seat Arosa. Un coche que permanecerá siempre en la memoria de muchos conductores. 

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Autobild España.