Con este truco cambiarás las escobillas del coche mucho más tarde
¿Alguna vez has pensado que el vinagre de tu cocina sería útil para las escobillas del coche? Te enseñamos cómo puede ayudarte, y qué es lo que debes hacer.
Hay muchas veces que no nos damos cuenta, pero tenemos productos u objetos que, aunque no lo parezca, son muy útiles y cumplen más de una función. Pero, lo más importante y seguramente lo que más te interese, estos productos pueden ayudarnos a ahorrarnos dinero y tiempo.
En este artículo te enseñamos cómo un producto tan común como es el vinagre, puede ser realmente útil para el mantenimiento de tu coche y, en específico, para las escobillas de tu limpiaparabrisas. Te lo contamos aquí.
El vinagre, un aliado para tu coche
El vinagre es uno de esos productos que no sólo se usan en la cocina como aliño de ensaladas, sino que también tiene otros usos, como es el de la limpieza y el mantenimiento. Durante muchas décadas se ha usado como limpiacristales, desatascador de tuberías, limpiador de lavadoras, o como multiusos de superficies, etc.
En lo que se refiere a los vehículos, también habrás escuchado que puede usarse como limpiador de coches, sobre todo porque sus propiedades neutralizan cualquier mal olor en caso de dejarlo aplicado durante 15-20 minutos sobre la superficie de tu coche.
Pues bien, hoy traemos dos nuevos usos, también para tu coche. Y es que el vinagre tiene una composición química bastante abrasiva, lo cual permite limpiar superficies difíciles. Como decimos, vamos con los dos trucos.
Primer truco: las escobillas del coche
Las escobillas del limpiaparabrisas son un elemento de los vehículos que probablemente pasen desapercibidos, y más aún cuando no hace mal tiempo. Pues bien, en una utopía, habría que sustituir las escobillas una vez al año.
Sin embargo, la realidad no es esta, y es que los conductores y conductoras no las suelen cambiar a menos que noten algún desperfecto a la hora de utilizarlas. Pues has de saber que, si aplicas un poco de vinagre sobre las escobillas, quedarán casi como nuevas.
Para ello, has de coger un paño (sin humedecerlo), y aplicar un poco de vinagre sobre él. A continuación, agarra una de las escobillas y pasa el paño por la parte interior. Seguramente verás cómo deja un rastro negro sobre el paño.
De esta forma, no quedarán como si las acabases de comprar, pero sí que recuperarán gran parte de sus cualidades. También es cierto que desde Auto Bild no te recomendamos que hagas esto cada año para escaquearte de cambiar las escobillas por unas nuevas, pero sí que te salva de un apuro.
El segundo truco
El segundo truco puede que te parezca más interesante. Y es que las llantas son uno de los recovecos donde más suciedad puedes encontrar, la cual es realmente difícil de limpiar y, sobre todo, algo muy tedioso para muchos conductores.
Pues bien, has de saber que el vinagre también es un gran aliado para que la suciedad de las llantas se desprenda con mayor facilidad. Dicho esto, deberás aplicar el vinagre sobre una esponja. A continuación, procede a limpiar los recovecos de las llantas de tu coche.
Una vez has hecho esto, aclara con abundante agua hasta que creas conveniente. Y, si además quieres que tus neumáticos también se vean como nuevos, también puedes usar vinagre. El procedimiento a seguir es el mismo.
Primero has de enjuagar el neumático con agua y vinagre. Luego, has de aclararlo con abundante agua y ojo, también es conveniente que eches un poco de jabón suave. Finalmente, vuelve a aclararlos con agua. Y ya tendrás tus llantas y neumáticos como nuevos.
Descubre más sobre Cristina Pérez Odriozola, autor/a de este artículo.
Conoce cómo trabajamos en Autobild España.