MotoGP 2017: ¿el Mundial más apretado de los últimos años?
Diego de Arístegui
MotoGP 2017 está siendo un campeonato realmente emocionante pero ¿es el Mundial más apretado de los últimos años? En las últimas cinco temporadas sólo dos veces se ha decidido el título de la categoría reina en la última cita del año en Valencia. Fue en 2013 con el duelo entre Marc Márquez y Jorge Lorenzo que se saldó con triunfo del de Cervera, y el que muchos recordáis, el de 2015 entre Jorge Lorenzo y Valentino Rossi.
El Mundial alcanza este fin de semana en Alemania (consulta los horarios para las carreras de Sachsenring) el ecuador del campeonato y son cuatro los pilotos que llegan muy pegados entre sí. Andrea Dovizioso domina la general con cuatro puntos de ventaja sobre Maverick Viñales, siete con respecto a Valentino Rossi y 11 en relación a Marc Márquez.
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¿Por qué no hay un dominador claro?
Los pilotos lo repiten cada fin de semana. "Cada fin de semana es una historia diferente", "Puedes ir bien en otro circuito y al siguiente sufrir", en definitiva, que no hay un pronóstico fiable sobre la mesa. El único que parecía tener cierta lógica era el de Maverick Viñales, que salió de Mugello con más de una carrera de ventaja con respecto a Dovizioso. Sin embargo, tras su 10ª posición en Montmeló y la caída del pasado fin de semana en Assen, todo ha vuelto a reiniciarse.
Otro actor que ha influido de manera evidente en que el campeonato no tenga un líder sólido es Michelin. El suministrador de neumáticos, en su afán por escuchar a los pilotos y llevar a cada carrera lo que piden, ha desesperado a unos y a otros en función del circuito. Viñales asegura que gran parte de sus problemas vienen por los neumáticos y cuando perjudican a las Yamaha, favorecen a los otros fabricantes y viceversa.
El nivel de MotoGP, espectacular
Si algo ha cambiado en MotoGP en la última década es que el nivel de la parrilla es más fuerte que nunca y las diferencias entre oficiales y satélites no son tan exagerdas como antes. Para muestra de ello el hecho de que tres pilotos privados como Crutchlow, Petrucci y Zarco ya saben lo que es subir al podio, y en el caso del francés incluso salir desde la pole. A esto hay que sumar el hecho de que ya son cinco los pilotos diferentes que han vencido en las ocho carreras disputadas hasta el momento, y sólo Maverick Viñales y Andrea Dovizioso han repetido triunfo.
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Por este motivo, cuando uno de los teóricos favoritos no tiene el fin de semana esperado o no consigue ser competitivo con su montura, se arriesga en primer lugar a tener que pasar por la Q1 y comprometerse su posición de salida, algo que ya le ha sucedido dos o tres veces a Jorge Lorenzo. Pero entrar en la Q2 tampoco garantiza nada si no has estado regularmente en el top-5. Para demostración lo que les sucedió en Assen a Maverick Viñales y Dani Pedrosa, que clasificaron undécimo y duodécimo respectivamente. Anteriormente, si un favorito se veía en esta tesitura en el peor de los casos finalizaba cuarto o quinto en carrera. Dicha realidad ha cambiado.
¿Se mantendrá la igualdad hasta final de temporada?
Lo cierto es que después del GP de Holanda, el calendario se introduce en circuitos donde ya no está tan claro que Yamaha o Honda sea superior la una sobre la otra. Asimismo, todavía tenemos que acudir a circuitos en donde Ducati podría volver a ganar, sobre todo en Austria donde en 2016 Iannone y Dovizioso ocuparon las dos primeras plazas del podio, pero también trazados como Misano o Silverstone.
Tirando de sensatez, lo lógico es pensar que, por ejemplo, el rendimiento de Dovizioso vaya cayendo por las carencias de la Ducati, lo que nos debería dejar una lucha entre Viñales, Márquez, Rossi e incluso Pedrosa si logra recuperar la ventaja que tiene en contra en estos momentos. En cualquier caso, se antoja más difícil que nunca establecer una quiniela sobre cómo pueden darse las cosas, ya que cada fin de semana los vencedores son unos y los perdedores otros. Sea como sea, ojalá tengamos esta variedad de alternativas de aquí hasta el final del campeonato.
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