Dormirse al volante es una situación tremendamente peligrosa. Es algo más habitual en la época veraniega, cuando los conductores hacen viajes más largos de los que habitúan y el cansancio hace mella en ellos. Es por eso que conviene seguir los consejos para no dormirse al volante de los expertos en la materia, los camioneros.

Pasan la vida en la carretera, motivo por el que tienen que hacer frente a todo tipo de situaciones en ella. La experiencia es el mejor profesor y, por eso, sus advertencias hay que tenerlas en cuenta.

Conduce de día

Es lo más lógico: si conduces a horas en las que el cuerpo no está acostumbrado a dormir, éste no tendrá dicha necesidad. Además, la presencia del sol y toda la luminosidad que deriva del él harán difícil que te duermas.

Evita las horas más peligrosas

No hablamos de la noche en general, si no de los tramos de horas en los que suelen concentrarse más accidentes: entre las 3 y las 5 de la madrugada, así como entre las 2 y las 4 de la tarde.

Haz descansos

Es habitual el pensamiento de hacer del viaje “de una”, pero es contraproducente y aumenta el peligro: es conveniente parar cada 200 kilómetros o cada dos horas.

Anticipa tu descanso

Si sabes que al día siguiente tienes que subirte al coche para viajar, intenta descansar como corresponde, de manera que al ponerte al volante estés fresco y no acuses el cansancio acumulado.

Come como es debido

A la hora de afrontar un viaje llenar el estómago es una mala idea. Olvídate de comidas copiosas y opta por alimentos con una digestión fácil. Verduras y frutas son opciones óptimas para ello.

Hidrátate de la manera correcta.

Aquí el problema es que teóricamente no se puede ni comer ni beber al volante, pero resulta conveniente que mientras conduces, vayas bebiendo agua para mantenerte hidratado. Eso sí, conviene no abusar de bebidas energéticas, puesto que estimulan en un primer momento, pero pueden tener un efecto rebote.

Mantén la temperatura adecuada

La temperatura tiene un impacto enorme en las condiciones físicas del conductor. El exceso de calor puede llevar a la lentitud de reflejos, minar la capacidad de reacción y potenciar la somnolencia. Utiliza el aire acondicionado para crear un ambiente fresco.

La música es clave

La música incide de manera directa en el estado de ánimo del conductor. Intenta evitar baladas y músicas lentas que contribuyan al adormecimiento, mejor decantarse por canciones animadas que ayuden a mantenerte despierto.

Habla con el copiloto

Mantener una conversación también es otra manera de estar activo y con el cerebro funcionando, lo que hace que sea más fácil estar despejado.

Haced turnos

Si en el coche hay más de una persona con carné de conducir, ir turnándoos al volante, de manera que cada uno acumule menos fatiga y así el cansancio sea menor.

La tecnología es tu aliada

Los coches más modernos cuentan con tecnología de todo tipo. En lo relativo a no quedarse dormido al volante, los sistemas de monitorización del conductor identifican cuando éste está cansado, así que cuando te avisen, aprovecha para parar y hacer un receso.