Bridgestone y Microsoft se alían para crear un sistema que monitoriza en tiempo real posibles fallos de los neumáticos

Según el Departamento de Transporte del Reino Unido, en el estudio “Factores que contribuyen a accidentes clasificados según gravedad", realizado en el año 2018, el 30% de los accidentes automovilísticos son causados por fallos técnicos. Y en esto se ha basado Bridgestone para aliarse con Microsoft con el objetivo de crear un sistema que monitoriza en tiempo real posibles fallos de los neumáticos. 

Bridgestone, mediante su alianza con Microsoft, ha desarrollado un exclusivo sistema de monitorización de daños en neumáticos, utilizando la Plataforma de Vehículos Conectados de Microsoft.

Así funcionan el sistema de monitorización de neumáticos de Bridgestone

Esta Plataforma de Vehículos Conectados de Microsoft es un escenario digital sobre el cual se pueden construir soluciones orientadas al cliente, que incluyen infotainment en el vehículo, navegación avanzada, conducción autónoma, servicios telemáticos y de predicción, y actualizaciones OTA (over the air, a través de internet, sin necesidad de acudir al concesionario). Además, incluye disponibilidad mundial y escala a nivel empresarial como parte del paquete Microsoft Azure.

Pero para entender la importancia de este sistema, lo primero es tener claro cuáles son los daños más habituales en los neumáticos: presión insuficiente, fatiga, desgaste irregular y, por último, daños causados por bordillos, baches u objetos en la carretera.

Afortunadamente, la mayoría de estos problemas ya pueden paliarse de manera fiable. El sistema de control de presión de neumáticos (TPMS) es obligatorio en todos los vehículos fabricados desde el año 2012 y ayuda a los conductores a evitar problemas por una baja presión en los mismos. Un mantenimiento regular y la sustitución de los neumáticos cuando corresponde, les protegerá del desgaste y la fatiga prematura.

Comparativa: 50 neumáticos de verano (medidas 245/45 R18)

La excepción y la brecha de seguridad son los daños en los neumáticos que no se detectan sin una inspección minuciosa y manual. Aunque suene como algo extraordinario, te aseguramos que es más habitual de lo que se pueda pensar. 

Los neumáticos dañados pueden provocar accidentes, existiendo además la posibilidad de perjudicar a otras partes del vehículo como, por ejemplo, las llantas o la carrocería.

El objetivo de este sistema de monitorización de los neumáticos que ha creado Bridgestone junto con Microsoft es alertar de cualquier percance en tiempo real. Para ello, emplea la infraestructura de la nube de compañía tecnológica, junto con los datos recogidos por sensores mediante un hardware ya instalado, y utiliza algoritmos para detectar incidencias que afecten a la superficie y la carcasa del neumático. 

El conductor puede ser informado inmediatamente del peligro y actuar en consecuencia para remediar esta situación. En la actualidad, no existe en el mercado ningún sistema de monitorización similar y otras alternativas requerirían la instalación de hardware adicional.

Laurent Dartoux, CEO y presidente de Bridgestone EMIA, apunta que: “Al asociarnos con Microsoft, tenemos la oportunidad de ofrecer a millones de conductores nuestro sistema de monitorización de daños en neumáticos, brindándoles mayor seguridad y tranquilidad”.

Por su parte, Tara Prakriya, directora general de Azure Mobility y de la Plataforma de Vehículos Conectados de Microsoft, argumenta algo similar y confirma que “su misión es fomentar que las empresas ofrezcan experiencias de movilidad conectada, seguras y personalizadas".

Otras aplicaciones para este mismo sistema de control de neumáticos

Este sistema de monitorización de daños en neumáticos cuenta con otras aplicaciones, porque no sólo reconoce cuándo se ha producido el daño, sino también dónde. De esta manera, se tiene una visión más amplia de las condiciones y la infraestructura de la carretera, que se pueden utilizar para alertar a los responsables de seguridad vial, señalando la presencia y ubicación de baches y otros peligros. 

Así, los futuros vehículos autónomos también podrían beneficiarse, transmitiendo información sobre contingencias locales a otros que se encuentren en los alrededores, gracias a los protocolos de comunicación car to car, así como del almacenamiento en la nube.

Actualmente, el nuevo sistema de monitorización de daños de Bridgestone está disponible para todas las flotas y fabricantes de equipo original de vehículos que usan Microsoft. Sí, por el momento no es una solución aplicable a turismos de uso particular, pero es un primer paso. Según se vaya implantando, se podría analizar su posible aplicación en los coches en serie.