Logo Autobild.es

Bugatti Type 57 Roadster Grand Raid: una pieza única y misteriosa

Bugatti Type 57 Roadster Grand Raid

Uno de los Bugatti más raros jamás construidos.

Desde su fundación, los modelos de Bugatti se han caracterizado por su diseño espectacular y una ingeniería vanguardista, con soluciones tecnológicas propias. Es difícil quedarse con un único modelo fabricado en Molsheim. Sin embargo, hay uno que destaca por ser una pieza única y misteriosa: el Bugatti Type 57 Roadster Grand Raid.

Hay que remontarse hasta la convulsa década de 1930 para encontrar el origen del Bugatti Type 57 Roadster Grand Raid. Unos años dominados por el auge de los totalitarismos y la crisis de las democracias occidentales, con la Gran Depresión como telón de fondo tras el crack de la bolsa de Nueva York en 1929. 

En octubre de 1934, fue presentado el Grand Raid en el Salon de l'Automobile de París ante la mirada de la prensa internacional y los mayores entusiastas de la automoción del momento. Se trataba de una de las versiones que la compañía francesa hizo del Type 57, diseñada para el raid, competición de rally de largo recorrido. 

 

Bugatti Type 57 Roadster Grand Raid: una pieza única y misteriosa

Bugatti Type 57 Roadster Grand Raid

Del Type 57 Grand Raid se construyeron solamente diez unidades, de las cuales, una resultó ser la más exclusiva y misteriosa: el Bugatti Type 57 Roadster Gran Raid Usine

Presentado en el Salon de l’Automobile de París, era un ejemplar único, fabricado sobre el chasis número 57222, caracterizada por su carrocería icónica fabricada en aluminio y pintado en negro y amarillo, los colores favoritos del fundador de la marca, Ettore Bugatti

“El Bugatti Type 57 Roadster Grand Raid Usine es una pieza excepcional de la herencia de Bugatti en todos los aspectos y encarna todo lo que representa Bugatti en el siglo XXI”, dice Christophe Piochon, presidente de Bugatti Automobiles. 

“Fue diseñado para el rendimiento, siguiendo los más altos estándares de artesanía y lujo. Es un coche deportivo de lujo, la inspiración para los coches modernos Bugatti”, añade Piochon. 

El misterio del Type 57 Roadster Grand Raid Usine

El misterio sobrevuela a esta unidad Usine del Type 57: la denominación ‘Usine’ nunca fue oficial de este fabricante. Además, lo que más define a este ejemplar es su aspecto, pero tampoco se conocen todos los detalles sobre ello, aunque se cree que el diseño del fue obra de Jean Bugatti, hijo del fundador.

Los modelos Bugatti Type 57 Roadster Grand Raid diferían de versiones como el Type 57SC Atlantic y el Type 57S Atalante porque estaban diseñados para competir, como se aprecia en el diseño de los guardabarros, más aerodinámicos y alargados, o en el parabrisas en forma de V.

El ángulo de la columna de dirección se ajustó para mover al conductor hacia atrás en el chasis y la palanca de cambios, el freno de mano y los pedales también se reposicionaron.

Poco después de su debut, el Bugatti Type 57 Roadster Grand Raid Usine participó en el rally París-Niza con el piloto Pierre Veyron al volante, el hombre que dio nombre al primer Bugatti de la era moderna en 2005. 

Un año después, en abril de 1935 y con Robert Benoist como piloto, la versión Usine del Gran Raid consiguió su primer título en la subida a Chavigny, demostrando sus capacidades. 

Se conserva en el Museo de Louwman

Bugatti Type 57 Roadster Grand Raid

En 1946 este misterioso coche de carreras fue vendido a un particular, quien le realizó algunas modificaciones en las luces y en los pasos de rueda. Estas alteraciones se eliminaron más tarde durante una completa restauración, devolviéndola a su configuración original. 

Desde 2001, el Type 57 Roadster Grand Raid Usine ha estado en exhibición en el Museo de Louwman en La Haya, un lugar donde se conservan más de 275 obras de arte de la historia del automovilismo y del motociclismo. 

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Autobild España.