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Prueba del Volkswagen Touareg V8 TDI. Prodigio diésel

Es un sueño en cuanto a potencia y rendimiento, el V8 TDI del Volkswagen Touareg. En esta época de anatemizar el diésel, algunos sacuden la cabeza con desaprobación. Otros, abren mucho los ojos de asombro y admiración. Nosotros pertenecemos al segundo grupo. Esta es la prueba del Volkswagen Touareg V8 TDI.

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Los dos compresores del V8 de cuatro litros (422 CV, 900 Nm) solo funcionan a dúo en la zona alta del cuentavueltas. Hasta la zona media, solo una de las dos válvulas de escape se abre en los cilindros. El sistema Valvelift solo activa válvulas adicionales después de 2.200 revoluciones, lo que significa que el segundo turbo comienza a entrar en escena lentamente.

En funcionamiento, no se nota nada de la coreografía de las válvulas. Y en todo caso, el el potente diésel funciona con un silencio inesperado. Volkswagen omitió deliberadamente un sistema de sonido artificial - ¡gracias por eso!

422 CV, 900 Nm: colosal
422 CV, 900 Nm: colosal Toni Bader / AUTO BILD

Esto hace que los 900 Nm de par, que ya alcanza a solo 1.250 vueltas, sean aún más sorprendentes. Un pequeño inconveniente: en una salida rápida del semáforo, todavía hay un breve respiro de un segundo antes de que los ocupantes sientan cómo sus espaldas se incrustan en los respaldos. En 4,8 segundos pasa de 0 a 100 km/h, y ya va a 200 km/h pasados solo 18,4. 

Mejor no saques tu lado deportivo

Por otro lado, el objetivo principal de su suave chasis con suspensión neumática es mimar a sus ocupantes. La deportividad y la agilidad en las curvas no son el punto fuerte de este coloso. El lastre adicional con el que el motor pesado presiona el eje delantero es claramente evidente al girar rápidamente en carreteras mojadas, donde la tracción total tiende repentinamente al subviraje.

Preparado para el confort, no para devorar curvas
Preparado para el confort, no para devorar curvas Toni Bader / AUTO BILD

Nuestro coche de prueba llevaba el chasis adaptable con estabilización de balanceo y dirección en todas las ruedas. Este último reduce el radio de giro en casi un metro hasta los 11, algo aceptable dado el enorme  tamaño del vehículo. Pero desde  el punto de vista de la dinámica de conducción, nosotros nos ahorraríamos los más de 4.000 que piden por este equipamiento extra.

Más sentido tiene pagar por la luz Matrix-LED inteligente, que funciona junto con el sistema de visión nocturna. Si la cámara termográfica detecta personas, animales o bicicletas que están a punto de cruzar la carretera, los faros (a partir de 60 km / h) los iluminan específicamente.Hablando de extras: la enorme pantalla de 15 pulgadas va en un paquete de equipamiento, por lo que es un desembolso considerable. 

Espectacular pantalla de 15 pulgadas
Espectacular pantalla de 15 pulgadas Toni Bader / AUTO BILD

Conclusión

A pesar del rendimiento exuberante, el diésel de ocho cilindros combina perfectamente con el acogedor Touareg. Si estás buscando un coche grande, espacioso y cómodo que te dé confianza en todos los aspectos, especialmente a la hora de adelantar, el V8 TDI te hará muy feliz. 

Valoración

Nota8

En esta prueba del Volkswagen Touareg V8 TDI atestiguamos que este es uno de los diésel más apasionantes del mercado. Pero a pesar de su potencia, prima el confort.

Lo mejor

Prestaciones, respuesta del motor, espacio, comodidad de marcha.

Lo peor

Tiende mucho al subviraje en curvas tomadas con rapidez.

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