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Comparativa: Passat, Superb, 508, Insignia, Optima

La nueva generación de la berlina alemana llega con el consolidado motor 2.0 TDI de 150 CV para plantar cara a la competencia. Aquí te presentamos una comparativa en la que el Volkswagen Passat se enfrenta a Skoda Superb, Peugeot 508, Opel Insignia y Kia Optima.

Motorizaciones comparadas:

En esta comparativa juntamos a la competencia real del nuevo Volkswagen Passat. Y por eso hemos elegido la variante con el motor que será más popular, el 2.0 TDI de 150 CV. Uno de esos duros candidatos es el Kia Optima, que se presenta con poderosas armas como un precio muy competitivo o unos imbatibles siete años de garantía. Además, el coreano cuenta con un diseño muy atractivo, que sobresale por encima de la sobriedad del alemán. Otro enemigo importante del Passat está en su propia casa: el Skoda Superb, que se enfrenta a él con un precio ajustado, un espacio interior increíble y la práctica solución de su portón con apertura en dos partes. Por otro lado, los franceses atacan con su Peugeot 508, que ha modernizado su imagen tras su última renovación y ofrece una tecnología refinada y su conocido y suave motor diésel. El último candidato a destronar al Passat, como no podría ser de otra forma, viene de la mano del Opel Insignia que quiere puntuar con tecnología punta y un precio muy competitivo, con el que los de Rüsselsheim ofrecen una berlina redonda. El suspense está servido. Queda en el aire la pregunta de si el refinado, pero también caro Passat, podrá superar en puntos a sus competitivos rivales.

5. Kia Optima 1.7 CRDi

Se podría decir que en el Kia Optima las formas penalizan su funcionalidad. Bajo su atractiva carrocería se esconde un coche poco práctico. Su inclinado parabrisas reduce la altura en las plazas delanteras y eso molestará a los conductores más altos. Además, sus confortables plazas traseras y un maletero correcto de 505 litros se ven empañados por una boca de carga pequeña y una capacidad de carga adicional de solo 446 kilos. La conducción es satisfactoria: por un lado, gracias a los cortos desarrollos de la transmisión, los adelantamientos se realizan con brío y sus 136 CV le ayudan a mostrar mucho temperamento. Además no resulta demasiado ruidoso. Aunque todo esto se ve eclipsado por un cambio impreciso, una dirección demasiado desmultiplicada y un chasis que no está del todo afinado. Pero lo que resulta más decepcionante es su frenada: ¡casi 40 metros para pasar de 100 km/h a 0! Eso, sin duda, compromete tu seguridad. La otra cara de la moneda son los 27.150 euros que cuesta. Un precio sin duda ajustado, que incluye las llantas de aleación de 16 pulgadas, climatizador, luces de día LED y siete años de garantía que dibujarán una sonrisa de tranquilidad en tu cara.

4. Peugeot 508 Blue HDi 150

Apenas se ve, pero se siente. Su lavado de cara hace del Peugeot 508 un coche mejor. Por desgracia se mantienen un espacio interior algo justo y su mala visibilidad, pero convencen su trabajado interior y su suave y potente motor diésel de 150 CV, cuyo turbo, al acelerar tras una pequeña pausa, entrega todo su poderío de una forma progresiva y sin tirones. Cuando vas en marcha todo va de maravilla... hasta que empeora el estado del asfalto. En ese momento, el Peugeot saca a relucir la rigidez de su chasis. Pero no te confundas. Si piensas que eso va a ser síntoma de una respuesta deportiva, te sentirás decepcionado. La dirección apenas comunica fielmente lo que está pasando bajo las ruedas y el coche tiende demasiado a subvirar en las curvas. La parte buena es que cuenta con un generoso equipamiento de serie, pero seguro que te lo piensas dos veces cuando veas que es claramente el más caro de la comparativa, porque cuesta 33.770 euros. Si te parece una barbaridad, ten en cuenta que hay disponible una variante HDi normal de 140 CV que cuesta 29.970 euros.

3. Opel Insignia 2.0 CDTI

La versión que hemos tenido en cuenta para esta comparativa es el Opel Insignia Selective, que es la más accesible de todas las equipadas con el motor CDTI de 140 CV, pero que por 28.740 euros viene equipada con elementos como faros LED, encendido automático de luces y llantas de 17 pulgadas. Una vez que te pones en marcha, aunque su chasis no es regulable, ofrece un confort sorprendente. No filtra las irregularidades de la carretera con la misma eficacia que el Volkswagen Passat, pero los baches cortos, como las juntas de dilatación, los absorbe con más solvencia. Por desgracia, este Opel también tiene sus debilidades. Aunque su consola central es ordenada, su manejo no es para nada intuitivo; el espacio en las plazas traseras el espacio es muy justo y la visibilidad hacia atrás se ve penalizada por su pequeña luneta. Pero la peor parte se la lleva el motor: el tosco diésel de 140 CV es tan ruidoso como flojo (te tocará pensarlo dos veces antes de realizar un adelantamiento), aunque sus largos desarrollos de cambio propician unos consumos realmente bajos de 4,8 l/100 km.

2. Skoda Superb 2.0 TDI

El Skoda Superb ya lleva seis años militando en el segmento de las berlinas medias, pero eso no le impide situarse una vez más muy arriba en una de nuestras comparativas. A lograrlo le ayuda su increíble espacio en las plazas traseras. Si nunca te has sentado en la segunda fila de asientos de este coche, te recomiendo que visites uno de los concesionarios oficiales de la marca y lo hagas, porque te vas a sentir como un ministro. Además, el espacio disponible para el equipaje también es enorme. Tampoco se debe olvidar que el modelo checo cuenta con una solidez general en su construcción que sorprende teniendo en cuenta lo que cuesta. El motor TDI de 140 CV no gira tan refinado como el nuevo de 150 del Passat, pero impulsa al Superb con brío de sobra y apenas consume más (5,3 l/100 km). Le penalizan, sin embargo, unos asientos delanteros algo pequeños, una suspensión más seca de lo deseado en sus reacciones y un comportamiento que, aunque correcto, no llega al nivel de su hermano de Wolfsburgo. Donde sí que lo aventaja es en cuestiones económicas: con 27.900 euros de precio base, se sitúa 2.300 por debajo del Passat.

1. Volkswagen Passat 2.0 TDI

El Volkswagen Passat gana contra su competencia real, en configuración diésel de 150 CV. Aunque muestra cierta debilidad por debajo de las 2.000 vueltas, lo cierto es que el resto de su comportamiento es intachable. Si analizas sus prestaciones, agrada: solo emplea 8,9 segundos para acelerar de 0 a 100 km/h y su consumo se queda en 5,1 litros. Lo mejor: un silencio desconocido hasta ahora en esta categoría. Ninguno llega a su nivel en el segmento dentro del apartado de rumorosidad. También marca la pauta en espacio interior, calidad de los acabados y manejo del cambio. Además, gracias a su luneta trasera de gran formato ofrece la mejor visibilidad. Y brilla con luz propia con los sistemas de asistencia y multimedia más avanzados. Por no hablar de su poderosa frenada: porque solo necesita 35,5 metros para pasar de 100 km/h a 0. Añadamos a eso unos asientos de primer nivel y una dirección precisa y comunicativa, así como el mayor valor de reventa, que es algo que siempre deberíamos tener en cuenta a la hora de comprar un coche. ¿No hay defectos que sacarle a este coche? Sí, unos pocos. Su suspensión conjuga un elevado nivel de confort con agilidad, aunque por culpa de sus llantas de 18 pulgadas (de serie en la versión Sport probada) la respuesta es algo seca sobre baches cortos y las juntas de la carretera. En este apartado, el Insignia lo hace más finamente. Y en cuestiones económicas podría hacerlo mejor: la versión básica de este Passat 2.0 TDI parte de 30.200 euros. Aunque teniendo en cuenta la calidad que aporta, probablemente es uno de los mejores en la relación calidad-precio.

Conclusión

De nuevo, una holgada victoria para el Passat. El nuevo Volkswagen apenas tiene defectos, y en muchos apartados marca un nuevo listón a superar. Por desgracia, no lo tiene todo. Si lo quieres, debes pagar más de 30.000 euros por él. El Skoda es más barato e incluso más amplio. Si quieres confort, mejor el Opel y si buscas diseño, tenlo claro, el Kia es el más revolucionario en ese aspecto.

En nuestro comparador de seguros hemos calculado lo que costaría asegurar un Volkswagen Passat. Para calcular el precio, tomamos como referencia un hombre de 30 años, con 10 de antigüedad de carné y sin siniestros, que vive en Madrid, utiliza el coche a diario, aparca en un garaje colectivo y recorre hasta 20.000 kilómetros al año. Con estos datos, el seguro a todo riesgo más asequible por calidad-precio lo ofrece Verti, por 538 euros.

Este coste podría ser menor si optas  por una póliza a todo riesgo con franquicia. En este caso, la más barata sería también la de Génesis. Cuesta 315 euros con franquicia de 300 euros.

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