¿Tendrían sentido los grandes Range Rover en un mundo de coches eléctricos?

VÍDEO: Así se vuelca un Range Rover en un segundo

El coche eléctrico empieza a ser el presente, aunque si tenemos en cuenta todas las variables que rodean a la industria automovilística y al propio día a día de esta tecnología, aún es el futuro para el ciudadano medio. De momento, los vehículos impulsados por este tipo de mecánicas son demasiado caros, y presentan algunos impedimentos que los de motor de combustión no. Pero, llegado el momento en el que estos coches sean lo normal, ¿tienen sentido modelos como los grandes Range Rover?

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A día de hoy el coche eléctrico es visto, sobre todo, como una más que interesante alternativa de movilidad urbana. De hecho, las propias autoridades están forzando todo lo que pueden para que los vehículos que se muevan por las grandes ciudades no emitan una pizca de CO2. Es ahí donde muestran su gran fortaleza. Sin embargo, habrá un momento en el que los vehículos eléctricos no sean vistos sólo como una herramienta de transporte urbano. Modelos recientemente presentados como el Audi e-tron o el inminente Porsche Taycan son dos claros ejemplos. Y eso por no nombrar otros como el Kia e-Niro, es decir, más asequibles para el gran público. Eso quiere decir que los diferentes fabricantes tienen muy claro que sí, que los motores van a cambiar poco a poco hasta la era eléctrica, pero lo segmentos a tratar seguirán siendo los mismos que hasta ahora.

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Land Rover Range Rover (8 imágenes)

Igual que Mercedes, Audi y compañía piensan en modelos totalmente electrificados de gran tamaño, los Range Rover de mayor tamaño tendrán igualmente cabida. De hecho, dentro del grupo británico ya tenemos un ejemplo cero emisiones que se ha llevado críticas inmejorables, el Jaguar I-Pace. Es decir, cuando lleguen los Range Rover eléctricos lo harán con una tecnología ya probada y muy desarrollada.

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No tenemos ninguna duda acerca del nivel de calidad que puedan tener los Range Rover eléctricos del futuro. No es algo que deba cambiar por la llegada de las mecánicas eléctricas. Pero, ¿y su carácter? Seguro que el fabricante trata de hacer que cambie lo menos posible, pero será imposible que no lo haga. Una cosa es asegurar que un Range Rover eléctrico tiene todo el sentido del mundo -o, al menos, el mismo derecho a existir que las apuestas de otras marcas-, y otra muy diferente es pensar que va a ser lo mismo. Habrá que adaptarse y ser consciente de que, aunque se pierdan algunas cosas, también se ganarán otras. Y ojo, que esto es algo que le va a pasar a todo el mundo. ¿O alguien piensa que cualquier deportivo eléctrico de los que hemos hablado últimamente va a ofrecer las mismas sensaciones que uno térmico de toda la vida? Las ofrecerá distintas. ¿Mejores o peores? Distintas.

Ya que hemos llegado hasta aquí, ¿quieres saber cuál es tu coche ideal?