Logo Autobild.es

Adiós Goverment Motors. Hola General Motors

Imagen por defecto

En el número 416 de AUTO BILD, que tendrás en el quiosco hasta el próximo 19 de diciembre, encontrarás un reportaje sobre la quiebra de la ciudad de Detroit. Si eres de los que ‘con esto de internet’ ya no compra la revista, te advierto que los datos que vas a encontrar aquí son solamente complementarios a ese artículo. La ciudad más poblada de Michigan creció al abrigo de la industria del motor desde comienzo del siglo XX y, aunque fue la urbe más floreciente de EEUU durante los 60 y comienzo de los 70, hoy acumula un 18% de paro, una cifra inimaginable en ese país donde la Reserva Federal ha señalado que la considerará que todavía están en crisis mientras el desempleo no baje del 8%. Con casi 20.000 viviendas vacías y subiendo, desde 2008, año del estallido de la burbuja financiera que, en 2009, supuso el derrumbe de General Motors y el abandono de Chrysler por parte de Daimler, los fabricantes de automóviles han hecho lo que han podido, más bien poco, para intentar sacar a su capital del atolladero.

Mientras Ford ha logrado mantener sus actividades sociales en Michigan y, lo que es más importante, las jubilaciones y seguros médicos de sus empleados –auténtico talón de Aquiles de la industria americana del motor en la última década- tanto GM como Chrysler han recortado donde han podido, que ha sido mucho. Sobre todo porque ambas compañías han cambiado de manos, Chrysler ha pasado a pertenecer al Grupo Fiat y General Motors tuvo que ser intervenida, de ahí el sobrenombre que se le dio Goverment Motors, por parte de la prensa de ese país.

Este es el auténtico motivo de este post, ya que esta misma semana, justo después del cierre de AUTO BILD –ya es mala pata- se produjo la noticia de la liquidación del paquete final de acciones que todavía figuraban en manos del Estado. Las comparaciones pueden ser odiosas, pero aquí resultan muy necesarias, porque es curioso ver cómo el gobierno de Obama en pocos meses decidió dejar caer a Lehman Broders, pero no permitió que sucediera lo mismo con GM, el mayor fabricante de automóviles mundial por entonces. Y es que muchos todavía nos preguntamos qué aporta al mundo la ingeniería financiera, pero incluso el mayor detractor del automóvil me concederá que esta industria es el paradigma de lo que se puede considerarse economía productiva.

Aunque la Casa Blanca va a imponer unas multas millonarias, cuando no penas de cárcel, a las empresas responsables del caos financiero que se vivió hace cuatro años, resulta que en GM van a perder dinero. Y no poco: de los 35.600 millones de euros inyectados en la compañía, se recuperarán 28.300, así que se han volatilizado 7.300 millones de euros. Si te parece mucho, te recuerdo que la Casa Blanca ha calculado que con esa acción ha preservado alrededor de un millón de puestos de trabajo –quizá, varios miles en España- y que hace poco el Gobierno de España reconoció que del multirescate a varias cajas nacionales no se van a poder recuperar alrededor de 40.000 millones de euros, nadie se atreve a concretar una cifra...

Mientras aquí no veo más que oficinas de cajas de ahorros cerrando, desde 2009, la industria del automóvil ha creado en EEUU nada menos que 370.000 empleos directos. Muchos de ellos en GM, en este caso sí como en España, en condiciones poco parecidas a las de los trabajadores que entraron en la empresa hace no tantos años. El próximo 15 de enero, Mary Barra será oficialmente la nueva CEO de General Motors, que lleva 15 trimestres consecutivos de beneficios. Desde aquí le deseo toda la suerte del mundo.

Las opiniones expresadas en este artículo son las del autor y no tienen por qué coincidir necesaria o exactamente con la posición de Axel Springer o Auto Bild España.

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Autobild España.