Nadie duda que los pilotos del TT de la Isla de Man tienen la tensión un poco más baja que el resto de los mortales. Esta cualidad les permite lanzarse sobre carreteras convencionales a unas velocidades que asustan sólo de pensarlo. Cuando además los ves en vídeo, el miedo crece por cada segundo que les vemos encima de la moto.
No te pierdas: La tremenda salvada de Niklas Ajo en Assen
Pero ahí no queda todo, hay pilotos como Bruce Anstey, vencedor del TT esta año en la categoría de Superstock 1000, que directamente, y perdonad por la expresión, nos los pone de corbata. Nada más tomar la salida, Anstey empieza a coger velocidad y se acerca una curva muy corta de derechas. Anstey se pega al lado derecho de la calzada, pero lo hace tanto que sube al bordillo y vuelve a bajar. Todo esto ¡a más de 250 kilómetros por hora! El meneo que le mete la moto a Anstey es tal que seguro que fue el día que más rápido hizo la digestión en su vida.