La Unión Europea prohíbe la venta de estos neumáticos

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Desde el 1 de mayo y por decisión de la UE queda prohibida la venta de neumáticos poco eficientes. Por tales se entiende aquellos que están etiquetados con letra G en resistencia a la rodadura y F en adherencia sobre mojado que hayan sido fabricados antes del 1 de noviembre de 2014.

Antes de seguir, te recomiendo que leas todo lo que debes saber sobre la etiqueta europea, esto te ayudará).

Aunque a muchos conductores la prohibición europea les pille de sorpresa, en realidad, viene de lejos.

En 2014, la Unión Europea decidió prohibir la venta de los neumáticos menos eficientes pero aprobó una moratoria de 30 meses para su aplicación.

El plazo se ha cumplido y desde el 1 de mayo todos los distribuidores han tenido que retirar los neumáticos G y F de sus escaparates.

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Además de poco eficientes, los neumáticos G son menos seguros

Cuando el vehículo está en marcha, las ruedas ofrecen una resistencia que el motor tiene que ser capaz de neutralizar y que provoca un esfuerzo adicional. Esto queda reflejado con unas letras que van de la A a la G; si tus neumáticos llevan la letra G, ¡peligro!

Podrías estar gastando hasta un 7,5% más o lo que es lo mismo, unos 300 euros en toda la vida útil de las gomas. En el caso de la adherencia a superficies mojadas, la diferencia entre llevar un neumático con letra A o G reside en que a 80 km/h necesitarás 18 metros más para frenar en este último caso.

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Por último, el nivel de ruido ya no depende de las letras, sino de tres líneas de ondas; cuantas más tenga, mas ruido habrá en el interior del habitáculo durante el rodaje. Por tanto, si tus neumáticos tienen la G, quizá ha llegado el momento de cambiarlo.

Recuerda que es importante invertir en un buen juego de neumáticos, sobre todo por tu seguridad y la de los demás y que es conveniente montarlos en talleres especializados. Por último, no olvides mirar la etiqueta europea, pues según apuntan desde El País, la diferencia entre una letra y otra puede significar que a los 30.000 km (vida útil de un neumático, por norma general) el ahorro de combustible haya compensado el precio superior de las ruedas.