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Los supermercados y la guerra de precios del combustible

Los supermercados y la guerra de precios del combustible

José María Martín Spuch

Desde AUTOBILD.ES estamos siguiendo muy de cerca la evolución de los supermercados y la guerra de precios del combustible que han abierto. Las grandes superficies rompen el oligopolio de las grandes petroleras estableciendo tarifas inferiores a un euro, algo que no se daba desde 2010.

Las petroleras han aprovechado su tiempo de hegemonía para establecer sus tarifas durante mucho tiempo, sin embargo los supermercados y la guerra de precios del combustible que han abierto, parecen estar invirtiendo esta tendencia.

A bombo y platillo, grandes superficies como Alcampo, Leclerc, Esclat, Simply, Eroski o Carrefour ofrecen a los conductores el combustible por debajo del euro, en el caso del diésel; y muy cercano a esta cifra, en el caso de la gasolina de 95 octanos. Si, además realizas una compra en el hipermercado o posees su tarjeta cliente, te puedes beneficiar de un mayor descuento, por lo que nos encontramos con precios que no se registraban desde 2010.

Todo esto tiene una razón; en este caso la fuerte bajada de precios en las materias primas, y en particular, del precio del petróleo. Desde enero el barril de brent, de referencia en Europa, se ha abaratado más del 45%, de 112 dólares a menos de 60 dólares el barril. Este descenso ha sido clave para la estrategia de marketing de las grandes superficies y sus agresivas ofertas.

Esta semana, el precio medio de la gasolina en España se marca en los 1,21 euros mientras que el gasóleo se queda en los 1,16 euros, algo que no sucedía desde noviembre de 2010. Si seguimos la tendencia de estos últimos 12 meses, desde enero de 2014 a diciembre, el diésel; que es el combustible utilizado por el 60% de los automóviles, se ha abaratado 19 céntimos; lo que supone un 14%. Esto significa que si tomamos como referencia un depósito de combustible medio, de 60 litros, hoy cuesta llenarlo 69,6 euros por los 81,4 euros de principios de año. Esto significa que nos ahorramos 11,8 euros.

Sigue puntualmente la información con los precios de los carburantes como en 2010

Con un descenso tan significativo y con los supermercados y la guerra de precios del combustible abierta, la Asociación Española de Operadores Petrolíferos (AOP) declara que la brecha existente entre el coste por barril y la tarifa final que llega a los surtidores (que supone un incremento del 14%) es necesaria. Argumentan que desde que se extrae hasta que llega a la gasolinera hay varios intermediarios: refinerías, importadores, transportistas, impuestos (que suponen cerca del 50% de los precios finales) y el margen de las gasolineras. A esto se suma la revalorización del dólar, moneda a la que cotiza el petróleo, respecto al euro que diluye parte de la rebaja.

Por su parte, La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) se ha convertido en un observador y crítico crucial ante esta situación y al cual se tienen que enfrentar las petroleras. Cada mes, la CNMC emite un extenso y completo informe en el que indica si las empresas aprovechan la rebaja de las materias primas para pellizcar unos céntimos, alimentando así sus márgenes de beneficio. En noviembre, el completo dossier apuntaba que los Precios de Venta al Público (PVP) estaban bajando, pero denunció que las gasolineras, de media, no siempre trasladan a sus tarifas toda la caída.

Este informe también constata que el combustible es más económico en las estaciones independientes que en las pertenecientes a una cadena (el litro es entre 2,8 y 4,2 céntimos más barato). Dentro del grupo de las gasolineras independientes, los hipermercados son los que aplican las tarifas más reducidas. En noviembre, de media, vendían la gasolina a 1,28 euros y el diésel a 1,20, tras aplicar bajadas con respecto a octubre del 4,8% y el 3,3% respectivamente.

Fuente: El País

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