Los coches de la familia Trump
En su vida privada, parece que la prole Trump tiene predilección por los coches británicos y alemanes. Por ejemplo, un Mercedes SLR McLaren del año 2003. También un Rolls-Royce Phanton. Son solo dos ejemplo.
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Su hija, Tiffany, conduce un Audi S5. El vástago de Trump tiene un Toyota Land Cruiser rojo del año 1972, y su hermana Ivanka y su marido han mostrado una foto a bordo de un Mercedes descapotable de los años 50.
Ya una semana antes de su investidura presidencial, en una entrevista al diario BILD, Donald Trump lanzó un aviso a BMW. No tiene problemas con que venda los modelos de la fábrica que tiene planeado construir en México, pero si pretenden introducirlos en Espados Unidos, habrá penalizaciones. Básicamente, dijo: "Amo México, a su presidente y a su gente. Pero tengo que decir a BMW que si sigue adelante con su proyecto de levantar una fábrica en México y vender esos coche en Estados Unidos, habrá un impuesto específico del 35%. De modo que mejor lo olvide".
"Alemania es un gran país", siguió diciendo el presidente, "un país de fabricantes. Otra cosa es que le haga el juego sucio a Estados Unidos. Porque no hay reciprocidad". Trump se refería a que, en la 5 Avenida de Nueva York, hay un Mercedes aparcado en cada puerta. "¿Cuántos Chevrolet ves en Alemania? No muchos, tal vez ninguno. Y eso no puede ser así, porque es un carril de una única dirección". Parece que Trump no sabía que, en 2013, Chevrolet, de GM, canceló sus ventas en Europa, y que ahora el grupo tiene en Opel su representación en nuestro continente.
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