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¿Gastarías 150.000 dólares en tunear un Subaru Impreza?

Subaru Impreza 150.000 dólares
A la gente le sobra el dinero.

¿Tuning sí o tuning no? La respuesta es negativa si nos referimos al tuneo marronero que llenó nuestras carreteras y los parkings de los polígonos en la década de los 2000, pero nos vemos obligados a responder afirmativamente si hablamos de preparaciones en condiciones, que toquen el apartado mecánico y que lleven a un nuevo nivel al coche en cuestión. El coche que os presentamos hoy es un caso peculiar, porque nada entre dos aguas y no sabemos que pensar. La calificación de este Subaru Impreza de 150.000 dólares dependerá de vosotros.

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Sí, habéis leído bien: alguien se ha dejado 150.000 dólares en sacar adelante este proyecto que tiene como base un Subaru Impreza RS de 2001, del que queda ya poco más que el envoltorio. Lo cierto es que su historia es de lo más peculiar. Ha saltado a la fama porque su dueño lo puso a la venta en Craiglist pidiendo por él la cantidad arriba mencionada. Si atendemos al historial mecánico del modelo, aunque excesivo, el precio no parece descabellado del todo.

En principio era un Impreza normal, con un motor 2.5 que su dueño se empeñó en intentar llevar hasta los 400 CV… lo que acabó significando estallar bastantes bloques. Visto que no era el camino a seguir, decidió optar por cambiar el propulsor por el archiconocido 2JZ, proveniente de un Toyota Supra y favorito de muchos preparadores amateur. No contento con eso, subió su potencia hasta los 655 CV y los transformó a tracción trasera.

Hasta ahí bien (más o menos), pero digamos que el resultado final no es muy práctico, ni dócil, ni, digamos… funcional. La distancia entre ejes es muy corta ara mantener la estabilidad y 655 CV son muchos para que los digiera solo un eje. La guinda es el hecho de que a pesar de todo el aumento de potencia… los frenos son de serie.

Además, el interior es un auténtico cristo: se ha instalado una jaula antivuelco, por lo que las plazas traseras han desaparecido; los asientos delanteros son bastante apañados, pero hay muy poco hueco para las piernas porque se ha tenido que hacer hueco a la transmisión, los paneles de las puertas son inexistentes, el cuadro de instrumentos no funciona y para subir o bajar las ventanillas hay que aplicar una fuente de energía externa. Menudo caramelito.

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