Este previo del GP de Hungría 2012 arranca con
Fernando Alonso como líder y terminará con el español en la misma
posición independientemente del resultado que el piloto de Ferrari
consiga en la carrera.
Alonso llega a Hungaroring a celebrar su 31 cumpleaños por todo
lo alto, como líder de la clasificación de pilotos con un margen
de puntos lo suficientemente amplio como para que nadie pueda
arrebatarle la posición en el peor de los casos.
El circuito de Hungaroring está cosiderado como el 'Montecarlo
permanente'. Es decir, un trazado muy revirado en el que la recta
principal apenas tiene 750 metros y en el que las curvas se van
sucediendo de forma casi consecutiva sin dar lugar al descanso de
los pilotos.
Con estas características, Hungaroring es un circuito que
exige una alta carga aerodinámica, punto este en el que Ferrari
parece haber encontrado un buen equilibrio y en el que, por
ejemplo, Red Bull marcó la diferencia el año pasado. El equipo
austriaco llega al GP de Hungría como protagonista de una nueva
polémica. Tras ser investigado
momentos antes del GP de Alemania y terminar impune, la FIA a
estudiado con detenimiento el caso y ha decidido obligar a Red Bull
a modificar su mapa de motor. De hecho, controlará la gestión de
estos dispositivos limitándolos a partir del GP de Hungría. Una
medida drástica pero que pretende solucionar de un plumazo las
distintas interpretaciones que se estaban dando de la prohibición
del disfusor soplado.
Por su parte, los dos pilotos de Red Bull llegan al Gran
Premio de Hungría como los perseguidores inmediatos de
Alonso en la general. La regularidad de Webber le permite estar por
delante de Vettel quien sigue con claros altibajos en su
rendimiento. La presión no le está sentando nada bien al alemán,
que se ve incapaz de encadenar una racha de buenas actuaciones
ahora que parece no contar con la superioridad técnica que tenía
con el monoplaza del año pasado.
Detrás de los hombres de Red Bull se ha encaramado Kimi
Räikkönen. El finés, sin entrar en las apuestas a comienzo de la
temporada, está cada vez más cerca de los favoritos y su primera
victoria en 2012 sigue siendo una posibilidad a tener en cuenta. Lo
mismo que su compañero de equipo, Romain Grosjean, que está
firmando una brillante actuación.
Ligeramente descolgados se han quedado los pilotos de McLaren.
El equipo británico ha tenido unas carreras bastante malas y tanto
Button como Hamilton esperan que su suerte cambie a partir del GP
de Hungría. Técnicamente, han hecho una profunda evolución en el
coche modificando casi toda la aerodinámica de la parte trasera. En
Hockenheim, Button ya demostró que, en condiciones de seco, el
monoplaza vuelve a ser muy competitivo y Hungaroring es un circuito
en el que el británico ha logrado algunos de sus mejores resultados
(como su primera victoria en la F1 en 2006).
Pero Button no es el único que guarda buenos recuerdos del GP de
Hungría. Pedro de la Rosa logró en aquel mismo año su mejor
resultado en la F1 terminando por detrás del inglés y Fernando Alonso consiguió la primera victoria
de su carrera en este mismo circuito en el año 2003. Sin embargo,
el español no ha podido volver a repetir aquel mítico triunfo. Este
año, Alonso celebra su 31 cumpleaños justamente el día en el que
puede romper con esa mala racha y ganar, de paso, su 31 Gran Premio
¿Lo conseguirá?