Fernando Alonso, preparado para la carrera más exigente

Las 24 Horas de Le Mans ya están en marcha para Fernando Alonso y para el resto de los 159 pilotos participantes. El piloto español, tras participar en la primera parte de clasificación ayer, se enfrenta esta noche a la dos partes restantes de la misma, que marcarán el orden de salida para la carrera que comienza el sábado.

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El Toyota número #8, con el que compiten Alonso, Nakajima y Buemi, tiene actualmente la ‘pole’ provisional para la prueba más famosa del mundo de la resistencia. Eso podría cambiar hoy si el otro Toyota u cualquier otro prototipo mejora el crono, aunque parece ser complicado debido a las opciones de lluvia que hay, al menos en la segunda clasificación.

Para Alonso, todo es nuevo en Le Mans, a pesar de las maratonianas sesiones en las que ha participado en el simulador de Toyota en Colonia y de los test en los que tomó parte hace ya una semana. Es el piloto de Toyota con menos experiencia de los seis que compiten con los dos TS050 Hybrid alineados en las 24 Horas de Le Mans 2018, pero el español progresa adecuadamente y aprende rápido.

Alonso, además, tiene buenos maestros. Uno de ellos es Alex Wurz, que ha participado en seis ocasiones en las 24 Horas de Le Mans y que las ha ganado dos veces. Una de ellas, en 2009, junto a Marc Gené, como parte del equipo Peugeot. Fernando también tiene buenos amigos sobre la pista, como Antonio García, piloto de Corvette en GTEPro, que ha debido darle buenos consejos.

“Es como hacer dos carreras de F1, bajarte y luego volver a subirte”

En un encuentro con la prensa en Le Mans, Alonso ha asegurado que las 24 Horas de Le Mans es la carrera más exigente del mundo. Principalmente lo es a nivel físico, mucho más demandante que la Fórmula 1, sobre todo por la duración de la prueba: es casi como hacer el calendario de F1 completo en un solo día.

“Es más exigente que cualquier otra carrera del mundo. Es como si hiciéramos 16 carreras de F1, como hacer el calendario completo en una carrera”, ha explicado Alonso. “Cuando acabas una carrera de F1, luego tienes dos semanas para recuperarte. Aquí hacemos un stint de cuatro horas, que es como hacer dos grandes premios, luego descansas y vuelves a subirte”, ha señalado.

El asturiano trabaja con un fisioterapeuta de Toyota, que le ha ayudado a prepararse para esta dura carrera, para la que hay que seguir un entrenamiento específico, con el que poder afrontar las exigencias de la prueba. Entre ellas se encuentran competir a altas velocidades y en difíciles de condiciones de lluvia y baja visibilidad, además del cansancio que afecta a la concentración durante tantas horas de conducción.

Una agenda sin precedentes en la F1 actual

Fernando Alonso tiene este año una agenda sin precedentes en la Fórmula 1 actual, con más de veinte carreras. Dos de ellas, Daytona y Le Mans, de 24 horas de duración. Además compagina Fórmula 1 y el Mundial de Resistencia, dos campeonatos del mundo del más alto nivel. El asturiano no persigue otro objetivo que ser un piloto lo más completo posible.

“Para ser el piloto más completo tienes que competir con diferentes coches, diferentes estilos y diferentes carreras”. El año pasado pudo conocer de primera mano cómo es la Indycar y cómo puede llegar allí a ser competitivo. Esta temporada, asegura, ha tenido que adaptarse a un nuevo estilo, desconocido para él hasta el momento, tras casi dos décadas en la Fórmula 1.

Imagen: Toyota Motorsport