Este Porsche 911 500 es lo más mono que verás hoy
¡Oh, el mundo de las preparaciones! Si no están estrictamente reguladas por la legislación, como ocurre en nuestro país, el cielo es de límite. Cualquiera que haya visitado Estados unidos ha tenido oportunidad de ver creaciones de lo más bizarras que, no obstante, son perfectamente legales para conducir por carretera. Que luego respondan al buen gusto es otra historia, pero solo por tener la posibilidad de crear algo único ya merece la pena. No hay que irse tan lejos para encontrar a nuestro protagonista de hoy, un Porsche 911 de lo más particular.
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Aparentemente cazado en Grecia, hay algo que no cuadra con este ‘nueveonce’. Es más alto y corto de lo habitual, lo que le otorga unas proporciones de lo más peculiares, casi de estilo caricaturesco. ¿Estamos ante el primer urbanita de la marca alemana? ¿Quiere Porsche conquistar el centro de las ciudades? ¿Acaso no hemos aprendido de la triste historia del Aston Martin Cygnet? Nada de eso, no hay porqué alarmarse. Bajo esa reconocible estética lo que se encuentra es un viejo Fiat 500. Eso explica la forma ahuevada del modelo.
Una vez superada la aberración inicial que pueda suscitar el modelo, lo que es totalmente comprensible puesto que hacer pasar esto por un 911 puede considerarse sacrilegio, la cosa es que tiene su punto y está bastante bien conseguido. El frontal adapta a las contenidas dimensiones el paragolpes y los reconocibles grupos ópticos, el lateral incorpora el nervio que recorre la cintura y llega hasta la entrada de aire de los pasos de rueda trasero, y en la zaga los pilotos están unidos por la banda roja, el difusor aloja dos salidas de escape (a saber si ambas son funcionales) y cuenta con una réplica del alerón. Podrá gustar o no, pero lo cierto es que quien lo haya creado se ha fijado en todos los detalles.
Fuente: Autoevolution.
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