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¿Cuál es mejor, BMW M4 CS o Porsche 911 Carrera S?

Son deportivos, son alemanes, tienen más de 400 CV de potencia y los mandan directamente a las ruedas traseras: ¿quién es el rey?

Este es uno de esos enfrentamientos que gusta analizar: ponemos frente a frente a dos de los deportivos más divertidos de conducir, el BMW M4 CS y el Porsche 911 Carrera S. Tienen similitudes entre sí (origen alemán, tracción trasera, invitan a pisar el acelerador), pero también sustanciales diferencias: mientras que el M4 CS es una berlina (aunque de lo más radical), el 911 es deportivo de pe a pa; y mientras que el nueveonce es un auténtico veterano con décadas de evolución a sus espaldas, el BMW es, como quien dice, un recién llegado. ¿Se puede dirimir cuál de los dos es mejor?

Compararlos desde el punto de vista estético es innecesario y, además, complicado, puesto que su concepto es totalmente diferente. El BMW añade músculo extra a la ya de por sí contundente imagen del M4 mediante un tratamiento intensivo de fibra de carbono: spoiler delantero, carcasas de los retrovisores y alerón. El 911, por su parte, mantiene las características líneas, con un perfil suave y reconocible que, eso sí, puede elegirse en formato cupé o cabrio.

VÍDEO: Nuevo BMW M4 CS en acción, ¡vaya gozada!

VÍDEO: Nuevo BMW M4 CS en acción, ¡vaya gozada!

Un detalle que si comparten ambos modelos es que se trata de versiones intermedias. Cuesta creerlo, puesto que son auténticas bestias, pero así es. El M4 CS se posiciona como una alternativa más deportiva que el M4 normal pero sin llegar a la radicalidad del M4 GTS. El 911 Carrera S hace lo propio entre el 911 y el 911 GTS, aunque es posible equipararlo a este.

¿Cómo? De serie monta un motor 3.0 turbo de 420 CV, pero en marzo de este mismo año el fabricante lanzó un pack que aumenta su potencia hasta los 450 CV del GTS. La mala noticia es que, aún con ello, el M4 CS es todavía más potente: su motor 3.0 tiene 460 CV. El 911 puede equipar tanto una caja de cambios manual de siete relaciones como la PDK, mientras que el BMW solo está disponible con la transmisión automática de doble embrague. El BMW manda toda la potencia al eje trasero sí o sí, mientras que Porsche ofrece las variantes 4S de tracción integral a sus clientes.

Hablemos de prestaciones. El BMW M4 CS acelera de 0 a 100 km/h en 3,9 segundos y alcanza los 280 km/h de velocidad punta. El Porsche pasa de 0 a 100 en 4,3 segundos con el cambio manual y en 4,1 con el PDK, llegando a 308 y 306 km/h de máxima en cada caso (con los 420 CV de serie).

Pasando a las ‘chucherías’, ambos cuenta con numerosos elementos que potencian la diversión. El BMW monta de serie suspensión con amortiguadores M adaptativos, llantas de aleación todavía más ligeras y frenos carbocerámicos. El ‘nueveonce’ ofrece de manera opcional la elevación hidráulica del morro, que evita roces innecesarios, y la dirección a a las cuatro ruedas, que agiliza su paso por curva y mejora su estabilidad.

En cuanto a precios, el Porsche 911 Carrera S cuesta 124.651 euros (144.350 en el caso del cabrio) y 10.000 euros más si equipa el paquete que sube hasta los 450 CV. El BMW M4 CS, por su parte, cuesta 133.900 euros, pero tratándose de una serie limitada puede que incluso ya no puedas hacerte con él.

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