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Nunca debemos creernos que estamos en un circuito cuando conducimos por la carretera. Eso como primera lección. Y como segunda, que nunca podemos infravalorar el coche y el conductor que viaja delante, tengamos el coche que tengamos. El conductor de este Porsche Cayman recibe una gran lección. Intentó seguir a todo un Tesla Model S, uno de los coches eléctrico más rápidos del mundo. Y claro, la cosa se le acabó yendo de las manos…
Ya sabéis que un coche eléctrico puede llegar a acelerar rapidísimo. El par es instantáneo, por lo que no tiene competencia en ese sentido. De la misma manera, no sabemos que versión del Tesla Model S montaba la unidad que graba las imágenes, pero sabemos que este modelo puede llegar a acelerar tan rápido como una moto, pues la variante P100D planta cara a los mismísimos Ferrari LaFerrari o McLaren P1.
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Por mucho que adoremos al Porsche Cayman, este modelo no tiene nada que hacer frente a la rápida aceleración de este Tesla Model S. Además, el conductor del deportivo alemán no debe ser muy hábil con las manos o simplemente, le pudieron los nervios. Parece “de cajón” que si pisamos el acelerador con contundencia en un giro cerrado llevando un coche potente de tracción trasera, la cosa se va a ir de las manos. Y así fue.
El conductor del Porsche Cayman intentó seguir al Tesla Model S en el primer acelerón. La berlina eléctrica sacó ventaja, aunque tuvo que frenar para hacer un giro a derechas. El deportivo alemán se volvió a acercar, y al ver como el Model S salía catapultado de la curva, decidió hacer eso mismo que estáis pensando, acelerar sin compasión. El resultado fue un giro de 360 grados y una buena risa por parte del conductor del Tesla.
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Fuente - @teszila (Instagram)