Conducir un Tesla 2.500 kilómetros sin recargar es posible, pero es muy probable que llamen a la policía

Los Tesla cuenta con el título de ser los primeros que apostaron por el coche eléctrico y abrieron la puerta a la popularización del concepto. A pesar de ello, hemos visto preparaciones locas que los han convertido en modelos de combustión, pero nunca nadie había salido de la tangente con esta solución que le permite recorrer 2.500 kilómetros sin recargar.

De hecho, se trata de una solución bastante sencilla que ya hemos visto aplicar en otros modelos incluso directamente de fábrica, aunque el coche en sí deja de ser un cero emisiones como tal: un sistema de autonomía extendida, también conocido como REX según sus siglas en inglés.

Lógicamente, Tesla nunca va a aplicar este tipo de tecnología en sus vehículos, pero eso no ha sido ningún problema para la gente del canal de Youtube de Percepción Distorsionada, que han llevado a cabo el proyecto por su cuenta:

Lo primero era encontrar un lugar para instalar el motor de combustión que hace las veces de generador para recargar la batería. Eligieron el maletero, eliminando la luneta trasera para poder sacar el escape, y aislando de paso el interior.

Esto resultaría clave por el ruido que produce el pequeño bloque, un propulsor gasolina de 400cc con una potencia de 13,5 CV. A pesar de su poco rendimiento, el volumen al que “ruge” es bastante alto aunque, por suerte, al interior del habitáculo solo entran 70 decibelios.

El primer problema está claro: la rumorosidad. Pero a esto hay que sumar un segundo, que es la pérdida de visibilidad, ya que la luna trasera se elimina, y un tercero, el más importante, que es el que hace que le pare la policía.

Debido a la poca potencia del motor de gasolina, la cantidad de electricidad que puede generar es también reducida, hasta el punto de que mientras va circulando, para que se produzca una recarga hábil, tiene que bajar la velocidad de la circulación de manera considerable, molestando a los otros conductores.

A pesar de los puntos negativos, lo cierto es que este peculiar Tesla Model S consigue recorrer 2.500 kilómetros sin recargar gracias al invento, así que también tiene su lado bueno.