El coche más rápido del mundo necesita protección antibalas
Si consigue superar los 1.600 km/h, el Bloodhound SSC se convertirá en el coche más rápido del mundo, para conseguirlo necesita protección antibalas porque, a tal velocidad, cualquier objeto puede ser mortal.
El coche supersónico tiene chasis de fibra de carbono (para que la resistencia aerodinámica no le hagan perder velocidad) y será a ambos lados del mismo donde monte los dos paneles antibalas. Dicen que para conseguir el título de coche más rápido del mundo acelerará hasta 1.607 km/h y que, a esa velocidad, cualquier objeto, por pequeño que sea, que golpee al conductores puede resultar mortal.
La prueba de velocidad se realiza en un espacio completamente diáfano y protegido de los pájaros, por lo que estos no son problema. El mayor peligro es que alguna piedra rompa una rueda que, circulando a tal velocidad, se desintegraría en mil pedazos que, en caso de dar al conductor, podrían hacerle tanto daño como un proyectil.
El Bloohdhound SSC mide 13,5 metros de largo y 2,5 metros de ancho; pesa algo más de 7.700 kilos y lleva un motor de 135.000 CV, similar al del Concorde.
No hay fecha para la prueba, pero se espera que luche por convertirse en el coche más rápido del mundo este año.
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