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Los Bollinger B1 y B2 se muestran casi en versión de producción

Bollinger B1 y Bollinger B2
Ya queda menos.

Bollinger anunció hace ya un tiempo la llegada de si primeros modelos, los Bollinger B1 y Bollinger B2, dos caras de la misma moneda, un SUV y un pick-up prácticamente idénticos y de naturaleza eléctrica. La marca sigue desarrollándolos y poco a poco están más cerca de su versión final de producción, que será prácticamente idéntica los prototipos que acaba de demostrar.

El diseño deja más que claro su apuesta por la contundencia: líneas rectas y formas angulosas para dar lugar prácticamente a dos armarios sobre ruedas. Ambos son un calco el uno del otro, solo que el B2 cambia la sección trasera por una caja de carga acorde a su estilo pick-up. Llama poderosamente la atención la gran cantidad de superficie acristalada que hay en la parte superior de la carrocería, algo que queda muy patente desde las tomas interiores.

Además de imagen, también comparten sus entrañas eléctricas: su sistema de propulsión está formado por dos bloques eléctricos, uno acoplado a cada eje, que desarrollan una potencia de 623 CV y un par máximo de 905 Nm. Gracias a ello son capaces de acelerar de 0 a 100 km/h en 4,5 segundos y de alcanzar una velocidad máxima de 161 km/h. Su batería tiene una capacidad de 120 kWh, lo que les otorga una autonomía por carga ligeramente superior a los 300 kilómetros.

Los Bollinger B1 y Bollinger B2 han sido concebidos para salir del asfalto con garantías, algo a lo que contribuyen tanto la distancia libre al suelo de 381 mm como sus ángulos de entrada, salida y ventral. Además, también son capaces de cargar hasta 2.359 kilos y de remolcar 3.402 kilos.

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